Los restaurantes locales abren una puerta de salida a la producción agropecuaria de la provincia Espaillat.

El mofongo, un plato a base de plátano verde, ajo, pico de gallo y chicharrón que aporta un inigualable sabor al paladar, se ha convertido en una marca emblemática de Moca, municipio cabecera de la provincia Espaillat.

El mofongo de Moca tiene un sello distintivo dentro de la gastronomía dominicana. Se destaca y da a conocer en todo el país y gran parte del mundo por su originalidad, calidad y sabor.

Propietarios de destacados restaurantes que se dedican a la venta del plato resaltan que el municipio ha desarrollado diferentes modalidades de turismo, con lugares atractivos para los turistas, como la Escuela de Bellas Artes, el Santuario del Corazón de Jesús, la Plaza de la Libertad.

Sin embargo, entienden que la mayor atención la concentra “La Ruta del Mofongo”, la cual atrae a cientos de familias.

La producción de plátano en República Dominicana, el ingrediente más importante en la preparación del mofongo, alcanzó los 2,527.5 millones de unidades en 2017. El ajo, en cambio, alcanzó los 33,593 quintales en 2017, según los datos del Ministerio de Agricultura.

Wilfredo Antonio Reyes, propietario de Mofongo Mi Terraza, explica que prepara el plato desde que, en medio de una crisis económica, le surgió la idea de abrir un colmado, pero al notar la poca factibilidad por la baja población del sector, su esposa le sugirió incursionar en el mofongo.

“Yo le dije que no teníamos dinero para arrancar a producir y vender mofongo, entonces hablamos con unas cuantas personas y una de ellas me ´fio´ 30 libras de capa de cerdo para hacer el chicharrón, después cogimos 100 plátanos ´fíaos´ a un señor en un mercado y arrancamos”.

Hoy a Reyes se le conoce como “Tony Mofongo” y su restaurante figura entre los más conocidos y concurridos por los turistas que visitan la zona. Al principio, “no se vendía la cantidad que pensábamos, sino que vendíamos cerca 10 mofongos diarios; entonces le cogí 1,000 pesos prestado a mi suegro para poder pagar y desde ahí comenzamos a negociar”, asegura Reyes.

A la semana ya compraba 45 libras de capa y más plátanos. Entonces inició el negocio familiar en su residencia, donde trabajaba con dos calderos pequeños y una pequeña estufa industrial hecha a mano que le regaló un amigo, la cual aún conserva para recordar sus inicios.

Narra que Mofongo Mi Terraza nació en 2007, cuando el vecino del frente le regaló cuatro “mesitas” pequeñas, y tomaron las sillas del comedor de sus suegros para que la gente se sentara.

Dice que él y un amigo se sentaban con una cerveza, con el objetivo de que la gente se parara y preguntara qué había ahí.

“Y de boca en boca fue que nació Mofongo Mi Terraza. El primer año mi esposa me dijo que buscáramos otra cosa que hacer porque esto no nos daría para vivir, pero yo le dije que no perdiéramos la confianza y la fe y siguiéramos luchando”.

“Entonces, dos años más tarde compramos el local que ahora tenemos, el cual tiene 80 mesas, donde comen unas 400 personas diarias, de las cuales el 80% son turistas”, específica Reyes.

Manifiesta que hoy en día el restaurante recibe hasta dos y tres mil personas diarias, siendo los domingos el día en que más clientes llegan en busca de mofongo.

“Gracias a Dios, del país entero y de otros países vienen a disfrutar el mofongo. Durante la semana yo pelo unos 22,000 plátanos y aquí con dos mofongos comen cuatro personas y tenemos precios muy asequibles”, afirma.

Francis Acosta, uno de los propietarios de Las 4F Restaurant, explica que desde el 28 de julio de 2014 se iniciaron con la producción y venta de mofongo y desde entonces, el restaurante recibe a miles de personas que van en busca de ese plato, por lo que la demanda ha registrado un crecimiento en los últimos dos años.

“El mofongo tradicional o clásico, como muchos le llaman y que lleva de 4 a 5 plátanos, ajo, consomé y chicharrón, es el que más venta tiene, por el sabor que tiene”, dice Acosta.

Explica que durante la temporada alta suelen utilizar alrededor de 35,000 plátanos al mes para la preparación del mofongo. Especifica que hasta el momento no hay otro elemento que identifique más a Moca que el mofongo.

“Ahora mismo, en términos gastronómicos, el mofongo es nuestro fuerte, aunque la gente venía por conocer los lugares turísticos que tiene el municipio y nos conocen por la diversidad de productos agrícolas que se producen, como el cacao, el café, los huevos, el plátano, la yuca, el pollo y el cerdo”, destaca.

Resalta que la especialidad de la casa es el “Mofongo 4×4”, el cual lleva unos 14 plátanos, longaniza, queso, chicharrón, pollo, libra de carne de cerdo salada y queso mozzarella, entre otros. Destaca entre los demás por su tamaño y su mezcla de ingredientes.

“El 4×4, que solo hacemos nosotros y es la especialidad de la casa, normalmente es para grupos de 6 a 8 personas y tiene una alta demanda”, declara Acosta.

Mofongo Juan Pablo es otro de los lugares emblemáticos del mofongo mocano. Su propietario, Juan Pablo Lantigua, explica que en sus inicios solo vendía chicharrón y un amigo le recomendó vender mofongo, debido a que su local está en un lugar céntrico, cerca de la Iglesia Sagrado Corazón de Jesús, visitada por los turistas.

“En ese tiempo yo no le hacía mucho caso porque yo no conocía mucho sobre el mofongo, pero un día entre un grupo de amigos nos pusimos a inventar e hicimos mofongo y comimos mucho esa noche”, dice Lantigua.

“Entonces, al otro día fui al negocio y puse una mesa al frente con un pilón, y ahí comenzó lo que yo le llamo ‘La nueva era del mofongo’, porque los sitios que lo vendían lo hacían en porciones pequeñas para una sola persona y costaba un dineral”, añade.

Asegura que desde que se inició con la venta de mofongo en 1999, no salía del asombro al ver la cantidad de personas de los pueblos aledaños que llegaban a comer. Especifica que los domingos vendía hasta 150 platos.

“El mofongo de Moca se dio a conocer de una manera muy rápida y en ese entonces yo pelaba entre 600 y 700 plátanos, pero ahora la demanda ha aumentado. Aquí tratamos de hacer un mofongo original y esa originalidad radica en tú sentir el chicharrón crujiente, y lo hacemos con mucho menos grasa, pero más jugoso”, afirma Lantigua.

Impacto económico del mofongo

El mofongo, debido a la composición de productos que posee, se ha convertido en un generador de empleos, y parte importante del desarrollo económico de Moca y la provincia Espaillat.

El sector agrícola ha sido uno de los que más beneficio ha recibido, ya que todos los ingredientes que se usan para la preparación de este famoso plato son de la producción local.

De acuerdo a los propietarios de restaurantes de Moca consultados, el 90% de los productos usados en el mofongo son de producción local, además de que genera más de 150 empleos directos.

“Todos los productos son locales, porque una de las ventajas es que tenemos todos los ingredientes en la provincia y no tenemos que estar comprando cosas fuera de aquí. Tenemos fincas que nos suplen los plátanos, suplidores de carne para el chicharrón, al igual que los demás ingredientes”, afirma Francis Acosta.

Explica que Las 4F Restaurant compra unos 35,000 plátanos al mes durante la temporada alta de turismo para la preparación del mofongo.

“El mofongo tiene un impacto directo en la economía de Moca y el flujo de turistas que nos visita para degustar de este plato, crece cada día”, resalta.

En ese sentido, el propietario del restaurante Mofongo Mi Terraza, especifica que compra más de 22,000 plátanos y unas 10,000 libras de cerdo semanal.

“Pero si sumas todos esos plátanos que pelamos en una semana, al mes pelamos más de 80,000, al igual que el cerdo, son más de 40,000 libras al mes y todo eso es producido aquí en Moca. Y si también le sumamos los 80 empleados que tenemos aquí, vemos que el mofongo impacta de manera directa a la economía mocana”, enfatiza.

Mientras, Mofongo Juan Pablo señala que utiliza unos 7,000 plátanos y cerca de 5,000 libras de cerdo a la semana para suplir la demanda de más 1,500 personas que visitan el establecimiento durante la semana en busca de mofongo.

“Los domingos es cuando más gente nos visita, vendemos unos 800 mofongos y el impacto que tiene esto es grande en nuestro turismo y nuestra economía”, asegura.

Innovación con yuca

En busca de crear otros productos a parte del mofongo, algunos de los restaurantes de Moca han decidido crear un nuevo producto y agregarlo al menú de la “Ruta del mofongo”. Se trata del mofongo de yuca, un rubro que goza de una buena aceptación en la gastronomía dominicana.

“Nosotros hacemos el mofongo de yuca y aunque aún es muy selecto el grupo de clientes que lo consume, ha tenido una buena aceptación y las ventas aumentan cada día y muchos prefieren el de yuca por encima del de plátano’, resalta Francis Acosta.