Este remanso de la naturaleza esta ubicado en el Parque Biológico del Municipio de Nigua, Provincia San Cristobal, muy próximo a la ciudad de Santo Domingo, fue creado en el 2009 mediante Decreto 571- 09 y Patrimonio Natural mediante la resolución 02-10 por ayuntamiento municipal.
Su belleza y tranquilidad invita a la recreación y esparcimiento de toda la familia, que puede disfrutar de los siete kilómetros que posee, con una riqueza natural con más de 50 especies de aves y una gran variedad de reptiles sostenido por las 180 especies de plantas.
El sonido de las olas del Mar Caribe armoniza el lugar, junto al canto de las aves y su tranquilidad hace de un remanso para los visitantes.
Su atractivo ecoturístico ofrece a los amantes de la naturaleza una vista especial de los manglares en el lago, que ofrece los visitantes un aire fresco lleno de yodo proveniente del mar.
El parque es administrado por la señora Ana Montán bajo el manejo del ministerio de Medio Ambiente y nos cuenta que el espacio es adecuado para la realizar actividades culturales, deportivas y religiosas.
“Este lugar era una mina de arena y luego un vertedero donde venían a parar todos los desechos y contaminantes de las zonas que colindan el área, hoy es un hermoso espacio de conservación que puede ser aprovechado para la recreación, entretenimiento y esparcimiento”, expresó Montán.
El humedal tiene una característica exclusiva, pues su mayor influencia está en las altas marejadas que provienen del mar que lo bordea, separado por una duna y que junto a las aguas dulces subterráneas, hacen especial la gran biodiversidad que aquí se desarrollan.
Montán explicó que el parque está abierto al público de 8:00 de la mañana a 6:00 de la tarde y que este ofrece una gran oportunidad para la observación de la vida silvestre y la pesca controlada.
El parque cuenta con un Centro de Control y Vigilancia con guardaparques y miembros del Servicio Nacional de Protección Ambiental (SENPA), responsables de la seguridad de los visitantes.
Proyectos
El parque tiene contemplado colocar pequeños botes para que los visitantes puedan navegar en todo el lago y así poder observar la gran variedad de aves que posee.
