El sargazo que llega a la zona del Caribe proviene del mar del Sargazo, ubicado en el Triángulo de las Bermudas. Según un estudio de la Universidad de Florida, su volumen se incrementó hasta en 100 veces los daños causados por la actividad humana en los mares y las costas caribeñas.

Las principales hipótesis sobre su formación es que se debe a un aumento en la temperatura del agua de los océanos provocada por el cambio climático y unos niveles de nutrientes excesivos.

Mientras los ambientalistas lo atribuyen a los efectos del calentamiento global en los mares, y al cambio en la dirección de las corrientes marinas, lo que hace que cada cierto tiempo inunde las playas del Caribe.

Se forma porque los residuos orgánicos de todo tipo se convierten en nutrientes para el sargazo, que crece rápido y se duplica cada 18 días, lo que rebasa el equilibrio ecológico.

En condiciones regulares, esta planta marina, clasificada como macroalga, es un ecosistema en mar abierto, “no daña y es refugio para tortugas, el pez dorado, el volador y otro endémico conocido como pez sargazo.

Estas algas causan mal olor y cambian el color de las aguas provocando un panorama desagradable para los turistas, pues modifican el equilibrio ecológico de los corales, erosionan las playas e ingresan otros microorganismos que provocan la modificación de los ecosistemas.

Aunque no se han hecho estudios sobre la posible afectación a la salud de los seres humanos, se sabe que el sargazo contiene organismos similares a los de las medusas que provocan irritación en la piel.

Una solución transitoria para República Dominicana sería recoger el sargazo dentro del mar mediante la colocación de vallas ecológicas, similares a las que usan en derrames de petróleo, a fin de impedir que llegue a las playas, ya que su principal víctima es la industria del turismo.

Del país no buscar una solución rápida y permanente a este problema, es casi seguro que en un futuro a muy corto plazo, tendríamos un desastre ecológico, y por ende, socioeconómico.

A este problema hay que andarle a tiempo porque este año la cantidad que lleva al Caribe es mayor que años anteriores.