Hace días la Cuidad Colonial ha sido centro de atención debido a los desacuerdos que tienen con el fomento de esta hacia el turismo dominicano.
La Asociación de Hoteles y Turismo de la República Dominicana, (Asonahores); el Ministerio de Turismo (Mitur) y así como el Clúster Turístico de Santo Domingo, solicitan a la Cámara de Diputados la aprobación del préstamo de US$90 millones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para la segunda etapa del proyecto de “Fomento del Turismo en la Ciudad Colonial de Santo Domingo”.
Diferentes sectores de la sociedad dominicana les preocupara de gran manera el tema del endeudamiento externo y el uso de estos recursos, si irán a la que está pautado o no, como es el caso de un sin número de proyectos en el país, que aun no se sabe donde fueron a parar los fondos y es normal tener ese preocupación.
Pero no obstante la Ciudad Colonial, ha sido referente de turismo urbano y cultural del Caribe, declarada el desde el 8 de diciembre de 1990, por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación y la Cultura, (UNESCO), como Patrimonio de la Humanidad, bajo el nombre de Ciudad Colonial de Santo Domingo; además de ser una importantísima oferta complementaria, y atractivo de primer orden, para la visita de extranjeros y personalidades a República Dominicana.
Entonces si la Cuidad Colonial es un patrimonio de la humanidad, reconocida mundialmente como la capital primada de América ¿Por qué no fomentar e invertir en su desarrollo turístico?, ¿Por qué poner tantos peros a algo que a la larga nos beneficia a todos como país?
¿Por que no dar luz verde al impulso turístico?