Con una muy buena participación en Fitur 2020, feria madrileña que marca el inicio del calendario turístico, la industria y sus actores dan una señal de optimismo que hacía falta ver y sentir.
Además los acuerdos aéreos y nuevos proyectos anunciados en la principal feria del turismo español, atestiguan que los inversionistas siguen confiando en dominicana.
Es así como empieza a despejarse la nebulosa que dejó sobre la industria la perversa campaña mediática, cuyos efectos se sintieron con mayor fuerza por no contrarrestarse a tiempo. Ya pasado ese mal suceso, las autoridades deben retomar ahora las estrategias que permitan incrementar la ocupación.
En este año electoral, el país no debe descuidar su más valioso renglón económico. Es por ello que cada esfuerzo e iniciativa promocional redundará en beneficio del desarrollo turístico. No hay dudas que la baja del sector se revertirá en pocos meses, sin embargo se requiere continuar por la dirección en la que se ha iniciado el año.
Arrancar el año con “buen pie”, es justamente lo que necesita el turismo dominicano, tras el difícil 2019, año en que el descrédito afectó considerablemente el flujo de turistas, y por ende el nivel de ocupación en los hoteles de República Dominicana.