La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés) estima que reembolsar los billetes cancelados por el impacto del coronavirus costará 32.000 millones de euros a nivel global (más de 34,000 millones de dólares), según los cálculos de la industria.
“Es una cantidad de dinero inmensa y las aerolíneas se están quedando sin liquidez”, informó su director general, Alexandre de Juniac.
El lobby de las aerolíneas defiende que las compañías ofrezcan vales a los pasajeros afectados en vez de devolver el dinero.
Por ello, desde IATA aseguran que son “conscientes de las inconveniencias que esto supone” para los viajeros, pero dicen que es “una cuestión de supervivencia” para evitar la quiebra.
“Los vales son la mejor solución que hemos encontrado”, afirmó de Juniac.
La legislación europea actual establece que cuando una aerolínea cancela un vuelo los pasajeros tienen derecho a elegir entre el reembolso y un vale para utilizar posteriormente en otro vuelo de la misma compañía.
En tanto, la Organización Europea de Consumidores denunció que las aerolíneas no pueden imponer vales para vuelos cancelados a raíz de la crisis del coronavirus y recuerda que los pasajeros europeos tienen derecho al reembolso de sus billetes.
Sin embargo, IATA reclama una “suspensión temporal” de esta normativa europea que les obliga a reembolsar si los viajeros lo piden para dar “margen de maniobra a las compañías para reparar sus flujos de efectivo”.
“No esperamos una recuperación significativa hasta el 2021”, avanza el economista de IATA Brian Pearce.
Desde el sector temen que cuando terminen las restricciones de viaje por la Covid-19 la demanda continúe baja por la recesión económica.