Aunque algunos consideren lo contrario y le resulte paradójico, la actual pandemia ha sido beneficiosa para la clase periodística del mundo, pues le ha hecho romper esquemas tradicionales que, precisamente, eran las trabas que mantenían estancados a muchos medios informativos.
Avalancha noticiosa
Lo primero es que el coronavirus ha dado origen a una avalancha de noticias interesantes, las cuales han permitido aumentar escandalosamente la cantidad de público que demanda noticias. La necesidad de estar bien informado, nunca fue tan vital e importante que en este grave momento.
Hasta hace menos de un mes para captar la atención había que esperar que se produjera un hecho inesperado o que algún personaje hiciera una declaración estrambótica; ahora hay hechos y personajes importantes las 24 horas (y dependiendo de la habilidad y experiencia de los directores de medios, éstos pueden o no aprovechar el momento).
Ayuda tamien el hecho de que casi la totalidad de la población mundial está en cuarentena, y la única entretención a su alcance es, en primer término, acceder a los medios de internet, y en segundo lugar, ver televisión. (Lamentablemente, debido a los dificultades para ser distribuidos, los periódicos de papel no han tenido la misma suerte),
Esquemas rotos
Gracias al coronavirus ha quedado demostrado que no es necesario estar en una cabina de radio o en un estudio de televisión para elaborar un programa. Ahora, usando una simple tecnología, esto se puede hacer desde cualquier lugar (por cierto en forma más pintoresca y menos aburrida).
Personalmente he quedado maravillado ver que estando periodistas en sus casas han entrevistado en forma “virtual” a personajes importantes y que programas de radio y televisión en los que participan varios comentaristas han continuado labores en forma ininterrumpida, sentados todos en lugares diferentes.
Algo muy novedoso han sido las ruedas de prensa que ofrece el Ministro de Salud Pública, en las que intervienen en vivo múltiples comunicadores que le hacen preguntas y hasta le cuestionan. También las alocuciones que funcionarios de alto nivel han hecho desde la casa de gobierno, estando presentes sólo ellos y contados asistentes. Con ello ha quedado demostrado que no necesariamente hay que ir a la sede de un ministerio, a un local de reuniones o a un restaurante para tener un encuentro con periodistas. (Basta sólo con anunciarlo, dar a conocer una plataforma digital y conectarse).
Pero mucho más trascendente es que la pandemia de COVID-19 ha demostrado que no es necesario ir diariamente a una sala de redacción a escribir una noticia, ya que esto ahora se puede hacer desde cualquier lugar las pérdidas de tiempo y los gastos que conlleva el transporte. Sencillamente, todos pueden trabajar desde sus casas.
Once años atrás
Debo señalar que en el grupo Noticias Al Momento SRL, para el cual trabajo, nos adelantamos hace once años a los acontecimientos actuales. Somos seis periodistas, dos miembros del personal administrativo, un técnico informático y un mensajero que trabajamos desde nuestros respectivos hogares desde al año 2000, sin tener sala de redacción en ningún lugar. Además, tenemos una división de radio con dos locutores y un editor, que preparan boletines noticiosos para 23 estaciones de radio, trabajando cada uno desde su propia casa y enviando su material ya elaborado por internet.
Tragedia para unos, beneficio para otros
Insisto: la actual crisis del coronavirus, si bien es cierto ha sido una tragedia para otros profesionales, para los periodistas ha sido altamente beneficiosa.