La popular playa de Boca Chica luce desierta en este Viernes Santo, cuando todos los negocios permanecen cerrados, acatando las medidas de cuarentena y aislamiento social impuestas para reducir los contagios por coronavirus en el país.
Algunos bañistas extranjeros se visualizaron dentro de la playa, los cuales fueron mandados a salir del agua y enviados a sus casas por dos policías que se trasladaban en una motocicleta custodiando toda la orilla y asegurando que nadie entre al agua.
En un recorrido transmitido en vivo a través de la página de Facebook de Diario Libre, se observa que tanto la playa de Andrés, como la paya de Boca Chica lucen desiertas, algo nunca antes visto en un Viernes Santo, cuando muchos dominicanos tienen por costumbre visitar estas playas.
Igualmente se observaron algunos extranjeros tomando el sol en uno de los hoteles del entorno.