México destacó este jueves la «oportunidad histórica» para construir una nueva era turística global tras la crisis por la pandemia del coronavirus, que ha dejado más de 8,4 millones de casos y supera los 440.000 muertos en el mundo.
En la LXV Reunión de la Comisión Regional para América de la Organización Mundial del Turismo (OMT) celebrada virtualmente, el secretario mexicano de turismo, Miguel Torruco, afirmó que esta nueva era turística debe estar alejada de las prácticas masivas, la sobreexplotación y el deterioro ambiental.
Torruco pidió a la industria turística aceptar que el viajar, que representa la esencia de esta actividad, «se ensombreció» por haberse constituido como uno de los principales vehículos de transmisión del contagio del virus.
En la reunión, el ministro resaltó que además de los efectos negativos de la pandemia, se debe valorar el que esta pausa obligada para combatirlo, nos ha dejado «escenas espectaculares» de la naturaleza y sitios turísticos.
Todo esto, indicó, coloca al mundo «ante la oportunidad histórica de construir una nueva era para el turismo, que no esté centrada en la exclusividad y que no dependa de factores externos».
El turismo es hoy una actividad interdependiente que debe ofrecer un mayor contenido cultural, lo cual supone mayores retos con nuevos productos y protocolos sanitarios ante el legado que ha dejado el coronavirus, comentó.
El ministro informó en el foro que México ha establecido entre sus prioridades el desarrollo de «un turismo diferente», con un nuevo enfoque social que privilegie el desarrollo y crecimiento de los sectores más desprotegidos, sobre todo los que viven en destinos turísticos.
«La aparición del coronavirus ha generado afectaciones no sólo en los ámbitos sanitario y económico, sino también en lo social y cultural, haciendo evidente el agotamiento y decadencia de la forma tradicional de hacer turismo», dijo el ministro mexicano.
En el encuentro, el secretario general de la OMT, el georgiano Zurab Pololikashvili, señaló que el turismo vive una crisis sin precedentes, con un panorama económico difícil de predecir y consecuencias sociales de graves repercusiones.
Pololikashvili sostuvo que en el primer trimestre del año se observó una caída de 67 millones de turistas a nivel mundial, una disminución de 80.000 millones de dólares en ingresos.
El titular de la OMT dijo que es importante «restablecer la confianza de los viajeros» con protocolos de seguridad que reduzcan los riesgos y que otorguen a gobiernos y empresas facilidades para abrir el turismo de una manera segura, fluida y responsable.
México recibió en el 2019 a 45 millones de turistas internacionales, una cifra que representó un crecimiento del 9 % respecto al año anterior, que dejaron al país una derrama económica de 24.563 millones de dólares; con una balanza comercial favorable al país por 14.715 millones de dólares.
El turismo en México representa alrededor del 8.7 % del producto interior bruto (PIB) y genera unos once millones de empleos directos e indirectos.