El reclamado plan de ayuda al turismo español ya está aquí. Lo presentó ayer el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una recepción en el Palacio de la Moncloa.
Los principales representantes de los empresarios y sindicatos le acompañaron en el evento, tanto ellos como los representantes de las comunidades autónomas celebraron el documento presentado, pero con euforia contenida. “Al menos tenemos una hoja de ruta, que hasta ahora era inexistente. Aunque la sensación que tengo es de disgusto”, comentaba ayer José Luis Yzuel, presidente de Hostelería de España.
La crítica más reiterada es la que se refiere a los ERTE. La falta de acuerdo del diálogo social ha impedido que el plan recoja concreción sobre la medida que ayer, en el evento de presentación del plan, más reclamaron empresarios y sindicatos al Gobierno. “Es una decepción que, a estas alturas, no estén todavía acordados los términos de la extensión de los ERTE en las condiciones imprescindibles, para evitar lleguen despidos masivos o quiebras”, comentaban ayer desde el lobby turístico, Exceltur que sin embargo reconoció que “el plan apunta en las direcciones correctas”. Incluso los sindicatos dieron la bienvenida al plan, aunque como advirtió Miguel Ángel Cilleros, secretario general de la Federación de Servicios de UGT, “para muchos puede que no sea todo lo ambicioso que se esperaba, pero lo importante es empezar a andar”. Sánchez intentó tranquilizar a su audiencia. “Los ERTE son una herramienta que se ha demostrado eficiente a la hora de frenar la destrucción de empleo. Han venido para quedarse”, aseguró sin desvelar la clave más ansiada. ¿Hasta cuando?.
El plan presentado ayer contempla un paquete de ayudas de 4.262 millones de euros, que el Gobierno suma a los 15.273 que ya ha puesto a disposición del sector desde la quiebra de Thomas Cook, por lo que en total sumarían 19.535 millones de euros que a través de diversos canales habrían llegado al Turismo. Pero no parece ser suficiente. “Es una buena noticia pero es claramente insuficiente para la industria turística en términos comparativos con lo que se ha inyectado al sector en otros países competidores de la Unión Europea”, lamenta Carlos Garrido, presidente de la Confederación Española de Agencias de Viajes.
Si nos centramos en los 4.262 millones anunciados ayer, 2.500 millones se refieren a líneas específicas para el sector de los crédito del ICO, englobadas en los 100.000 de euros en avales aprobados cuando se declaró el estado de alarma. Esos 2.500 millones, que ya habían sido anunciados, forman parte del paquete destinado a “medidas para la reactivación del sector” que en total está dotado con 3.362 millones. A los créditos ICO, se suman 106 millones destinados a formación y otros 756 millones que sufragarán una rebaja de tasas de aterrizaje para incentivar la llegada de aerolíneas que hará Aena. Medida también calificada por la Asociación de Líneas Aéreas (ALA) como “un paso adelante, pero insuficiente” y pide que Aena sufrague una rebaja mayor, a cargo de sus dividendo.
En este apartado el Gobierno también ha incluido una moratoria de un año para operaciones financieras del sector turístico con garantía hipotecaria.
Otro foco estratégico del plan pivota sobre la promoción de España como destino turístico seguro. Se han destinado 200.000 euros a diseñar 21 guías de actuación específica para cada subsector con medidas para prevenir el contagio del coronavirus y la creación de un distintivo de destino seguro. Con este lema por bandera, se ha puesto en marcha una campaña de marketing y promoción turística dotada de 38,1 millones de euros, con un fuerte foco en el turismo nacional.
Pero la partida con mayor dotación económica directa, 859 millones de euros, está enfocada al futuro y destinada a mejorar la competitividad de España como destino turístico. Financiará proyectos sostenibles, digitalización y habrá 3,3 millones para la creación de un observatorio de inteligencia turística, que analice la demanda nacional e internacional. “La industria debe adaptarse, prepararse para aprovechar el potencial de las tendencias globales, apostar por un turismo sostenible para sentar las bases del modelo turístico del futuro”, aseguró el presidente del Gobierno. Más allá de la ampliación de los ERTE, el sector encuentra a faltar medidas como la rebaja del IVA, al estilo alemán, incentivos directos para la vacaciones familiares como ha hecho Italia o , una solución alternativa a la obligación de las compañías de sufragar las anulaciones con dinero en efectivo que, según las organizaciones del sector, pone en riesgo su liquidez.