Cuba inicio su plan progresivo de reapertura tras la epidemia de coronavirus, excepto en los territorios de La Habana y Matanzas, los únicos del país donde aún se registran casos de la enfermedad, anunció el primer ministro, Manuel Marrero. Los vuelos comerciales se mantienen suspendidos -los turistas extranjeros de la segunda fase llegarán en vuelos chárter-, por lo que la isla se mantendrá cerrada a los no residentes hasta que entre en vigor la tercera y última fase de la primera etapa.
En la primera fase de la etapa de recuperación se mantienen algunas medidas como el uso de la mascarilla y la limitación de aforo en espacios públicos, así como la suspensión de clases, pero regresa el transporte público dentro de las ciudades y entre municipios de una misma provincia.
También se reanudan los servicios hospitalarios al 50% de la capacidad y retoma sus actividades el sector autónomo o «cuentapropista».
Abre el turismo solo para cubanos, sin incluir los cayos del norte y sur de Cuba, destinados a alojar a los viajeros internacionales, que estarán limitados a esa porción del territorio cuando comience la segunda fase de reapertura.
Previsiblemente esta se aplicará a todo el país por igual, al contrario de las fases 1 y 2 que entrarán en vigor indistintamente en cada territorio de acuerdo a su situación sanitaria.
La Habana y Matanzas
El Gobierno cubano no ha detallado cual es el calendario previsto ni los indicadores mínimos necesarios para que La Habana y Matanzas comiencen el proceso de desescalada, que podría demorarse en el caso de la capital, donde han surgido varios brotes del virus en los últimos días.
Cuba, que cerró sus fronteras el 2 de abril pero en ningún momento ha decretado confinamiento obligatorio, suma hasta la fecha 2.273 contagios confirmados de COVID-19 y 84 fallecimientos, con una tasa de recuperación del 87,8 % y 193 casos activos de la enfermedad en la actualidad, la mayoría en la capital (154).
«Pedimos la máxima colaboración de la población en la necesidad de no bajar la guardia, mantener el distanciamiento físico y las medidas sanitarias a fin de iniciar este tránsito gradual a la normalidad minimizando los riesgos», señaló el primer ministro en una reunión encabezada por el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel
La Habana registra todavía algunos casos de infección. Foto: periodismodebarrio.org.
El Gobierno declaró recientemente controlada la epidemia de coronavirus y anunció la semana pasada el plan de reapertura tras casi tres meses de restricciones, que aún se mantienen a pesar de que el municipio especial Isla de la Juventud y trece de las quince provincias cubanas no reportan nuevos casos desde hace más de dos semanas.
Entonces las autoridades no especificaron fechas de inicio pero adelantaron que podría comenzar esta semana de no «ocurrir incidentes» que modificaran la curva de la enfermedad
Aunque Matanzas «evoluciona favorablemente» en el control de la COVID-19 aún no cumple con todos los indicadores sanitarios, por lo que se decidió demorar el proceso de desescalada en ese territorio, explicó Marrero.
Ya se había adelantado que La Habana, el epicentro de la epidemia en el país, sería la última región en flexibilizar las restricciones vigentes, que incluyen uso obligatorio de la mascarilla fuera de casa, la suspensión del transporte público y el cierre total de fronteras salvo excepciones.