Pueden abrir las puertas de par en par al turismo y pueden darles todo tipo de incentivos a operadores, a líneas aéreas y a las personas que se “arriesguen” a viajar, pero no es cierto que van a arrancar en cantidad significativa para la República Dominicana porque no dependería de ellas, sino de factores como el de la evolución de la pandemia en el mundo, las expectativas de una vacuna y la situación económica en los países emisores. Por eso, la inversión millonaria en dólares para el sector, dicen expertos, tendría un mejor uso si se dedicara a producir empleos y a dinamizar, por ejemplo, a las pymes. Lo de eliminar todo requisito de pruebas COVID-19 a los turistas es un paso muy osado que le puede pasar factura al Gobierno.