La caída de los ingresos por la actividad turística fue de casi 60 % en el primer semestre, de acuerdo a las cifras del Banco Central de la República Dominicana.

En un año el monto de divisas que ingresó al país pasó de 4,086 millones de dólares en la primera mitad de 2019 hasta unos 1,638 millones de dólares entre enero y junio de este año.

Se trata de unos 2,448 millones de dólares menos que no ingresaron al país por el impacto de las medidas para evitar la propagación del COVID-19 que incluyeron el cierre de las fronteras por más de tres meses.

La actividad turística aporta casi un tercio de las divisas que ingresan a República Dominicana y su cierre significó un periodo de presiones cambiarias que se extendió entre abril y julio.

El informe “Resultados preliminares de la Economía Dominicana Enero-Junio 2020” indica que la tasa de ocupación hotelera en el primer semestre fue de 58.9 %, cuando el año pasado fue de 79.6 %. Es decir que, mientras en el primer semestre de 2019 de cada 100 habitaciones hoteleras se ocuparon casi 80, para este año la proporción bajó a casi 59 habitaciones ocupadas de cada 100 disponibles.

Un sector deprimido

La caída del sector turístico fue de 43.3 % en el primer semestre, mucho más profundo que el retroceso de 8.5 % que registró la economía dominicana en ese periodo.

El turismo ha sido de los sectores más golpeados durante la pandemia. La reapertura del sector, que se concretó el 1 de julio pasado, no ha sido total. Algunos hoteles han preferido esperar la temporada alta que comienza en noviembre próximo.

Entre enero y julio llegaron al país 1.69 millones de visitantes, un flujo de turistas que contrasta con los 4.54 millones de pasajeros que arribaron a la República Dominicana.

A finales de agosto el presidente Luis Abinader y el ministro de Turismo, David Collado, expusieron un Plan de Recuperación Responsable del Sector Turismo con el que se espera la reactivación de la actividad, que aporta alrededor de 8 % del PIB dominicano.

El plan incluye una inversión en promoción y financiamiento será de US$28 millones, así como unos 420 millones de pesos en programas de garantizar rutas aéreas, mediante acuerdos con las aerolíneas. Igualmente, se aplicarán incentivos fiscales para el sector turístico.