Estas canciones de protesta generaron incluso la ira del Dr. Joaquín Balaguer, hasta el punto de que Johnny Ventura confesó que lo iban a asesinar en 1978.
En los años setenta la lucha callejera fue a ritmo de merengue y en eso jugó un rol vital la orquesta el Combo Show. Cuando el Medio Millón se estrenó y pegó Los Indios, y mucho más al grito de Los mismos Indios. Muchas guaguas de la UASD llenas de estudiantes fueron a parar al Palacio de la Policía.
Johnny Ventura, no estuvo de espalda a la lucha social e ingreso al Partido Revolucionario Dominicano (PRD), la principal fuerza de oposición de entonces y fue cercano de quien se convertiría en líder de esa formación, José Francisco Peña Gómez.
Uno de sus más sonados éxitos, “El tabaco”, es un merengue de protesta disfrazado con su popular estribillo: ‘el tabaco es fuerte, pero hay que fumarlo’. Su popularidad lo llevó a viajar a Estados Unidos, Colombia, Venezuela, Ecuador, Centroamérica, México y Europa.