Un año más, como cada 27 de septiembre, celebramos el Día Mundial del Turismo. Una fecha para dar a conocer el valor social, cultural, político y económico del sector. Precisamente, en esta edición, marcada por la clara recuperación, la Organización Mundial del Turismo lanza un claro mensaje: es momento de repensar el turismo.
Esta labor de recapacitar, de reconsiderar, en definitiva, de reconstruir, está más que justificada por los datos que, aunque cada vez son más positivos y esperanzadores, no hacen más que recordarnos que debemos “arrimar el hombro” y ponernos “manos a la obra” para consolidar esta senda de crecimiento que estamos experimentando. No debemos olvidar que durante el año 2019 la llegada de turistas extranjeros hacia la República Dominicana registró un total de 6,446,036 viajeros. Sin embargo, para 2020 esta cifra se desplomó cerca del 62.7% debido a las incidencias de la pandemia. Lo cierto es que, en 2021, los resultados fueron notables cercanos a los cinco millones de visitantes no extranjeros, un crecimiento de 107.6% respecto al año anterior. Una clara evidencia de que tenemos una tarea: superar los datos prepandemia debe ser nuestra meta.
En un contexto de inestabilidad como en el que nos encontramos, se hace necesario dar un paso más al frente y fortalecer nuestra resiliencia. Por ello, es momento de repensar el turismo e impulsar su transformación con el fin lograr un sector más sostenible, inclusivo y resiliente, un sector que contribuya al desarrollo a través de la educación y la generación de empleo.
Se hace imprescindible, como decía, impulsar su modernización. Es decir, evolucionar e innovar. La digitalización juega un papel clave para afrontar los retos del futuro, favoreciendo el desarrollo eficiente de las compañías y la reducción de su impacto medioambiental. La tecnología ha dejado de ser una opción para convertirse en una necesidad, erigiéndose, así como la perfecta aliada para garantizar la excelencia operativa y mejorar la experiencia del cliente y del empleado.
Por fortuna, observamos una mayor concienciación y exigencia en materia de sostenibilidad por parte de la sociedad en general (el 71% de los clientes aseguran que quieren viajar de forma responsable), y especialmente de la juventud, que cada vez valora y prioriza más las experiencias que generan un impacto positivo en el medioambiente y en las comunidades de los destinos anfitriones. Contar, por tanto, con la visión de los jóvenes, como potenciales turistas y empleados, es clave para enfocar el camino que debemos seguir. Además, en respuesta a este nuevo paradigma, las empresas tenemos una influencia directa en la sociedad, el planeta y el desarrollo económico, y debemos asumir nuestro compromiso de sensibilizar a todos nuestros grupos de interés, tanto a clientes, como proveedores y comunidad local, así como de capacitar a los empleados en estas nuevas formas de hacer y entender el turismo.
Nos enfrentamos a un futuro con grandes desafíos y desde Grupo Piñero estamos preparados para asumirlos con optimismo y entusiasmo. Llevamos años trabajando con el firme propósito de incorporar criterios ambientales, sociales y de buen gobierno – ESG- en todas nuestras decisiones y proyectos, con el objetivo de convertirnos en un referente en Turismo Sostenible.
Nuestro ADN lleva implícito el respeto absoluto por los entornos y la devoción por las personas. Sabemos que la prosperidad de nuestra compañía está directamente relacionada con la prosperidad de los destinos donde operamos. Por lo que seguiremos apoyando a las comunidades locales, conservando su esencia y su cultura; haciendo un uso responsable de los recursos; y ofreciendo a nuestros clientes un servicio excelente como lo hemos hecho en los últimos 45 años.
Y hoy, en el Día Mundial del Turismo, instamos a repensar juntos la responsabilidad compartida que tenemos para impulsar la competitividad del sector y construir entre todos el Turismo que deseamos.