Cuando el turismo se ofrece y se consume de manera responsable y respetuosa con el entorno y la gente, a partir de un interés genuino en la protección de los recursos naturales, se benefician la comunidad receptora, el medio ambiente y la actividad turística.
Eso lo tienen muy claro los chicos de Nateevos, la plataforma que desde agosto de 2021 conecta a los proveedores locales con los usuarios del país y el mundo para asegurar una experiencia turística circular que favorezca a todos.
Para Giancarlo Frías, Nicolás Bera y Michelle Arthur, el nombre es mucho más que la primera aplicación móvil dominicana enfocada al turismo comunitario responsable.
Se trata de que el usuario conozca, disfrute y aprecie los rincones de República Dominicana desde los ojos de los locales, que se conecte con el origen, con los proveedores de las riquezas naturales y culturales que hacen del país el destino favorito del Caribe.
Se promueven como “la alternativa local a Airbnb que busca hacer del turismo una recreación sostenible a través de soluciones tecnológicas”; pero un vistazo al contenido de la aplicación asegura más ventajas que la plataforma internacional y es que, para Nateevos, “nosotros somos de aquí y nadie más que nosotros sabemos lo chulo de todo lo que se puede hacer aquí”.
¿Cómo nació?
Giancarlo y Nicolás crearon en 2017 la agencia de deportes de montaña Canyoning República Dominicana.
Conocer el país entero e impactar en las comunidades en las que hacían excursiones les hizo notar que había muchísimas otras experiencias más allá del turismo de aventura manejada por locales a los que no podían ayudar porque no llevaban excursiones allí, explica Nicolás, director de Operaciones de Nateevos.
¿Cómo promover el empleo y las oportunidades en esas comunidades?
Creando una plataforma tecnológica donde los locales registraran todas las experiencias que podían ofrecer a los viajeros.
“Porque así como haces kayak en el río Jamao puedes hacer una ruta cultural en Mao, de música y merengue”, sostiene.
Comenzaron a trabajar en ello en 2019.
“En el 2020 entra la pandemia y comenzamos a darle forma al proyecto desde la casa, viéndolo también como una facilidad para el público que ahora tendría que viajar solo”, indica Giancarlo, director general de Nateevos.
“Es decir, reservo en la aplicación y me voy con mi gente a disfrutar de la playa, la montaña, la Zona Colonial, lo que sea que quieras hacer de forma responsable”.
Y nació la aplicación con esa idea de conectar a los prestadores de servicios en las comunidades con los viajeros, pero con una visión enfocada al cuidado del ambiente.
Cualquiera puede beneficiarse del emprendimiento criollo. Solo hay que bajar la app, registrarse como usuario y subir no solo experiencias (viajes), sino opciones de estadías (espacios disponibles para hospedar viajeros) o eventos (actividades de todo tipo).
Una comunidad virtual
Con la app en desarrollo, los chicos crearon un podcast, un blog y redes sociales para compartir impresiones con la comunidad viajera.
“Creamos esos canales de comunicación para ir hablando de Nateevos ir educando un poco a la gente; luego de lanzar la aplicación creamos la plataforma web, para hacerlo un poco más fácil”, comparte Michelle, directora de Mercadeo.
En poco tiempo se han convertido en la plataforma con la mayor cantidad de experiencias locales (64 en la página), desde paddle surf en el río Yásica (Puerto Plata) y escalada en la Vía Ferrata de playa Frontón (Samaná) hasta avistamiento de aves en Montecristi.
Desde agosto del 2021, unos 2,616 usuarios han descargado la aplicación y unos mil ya se han registrado para subir experiencias, estadías y eventos.
Nateevos es el intermediario que asegura que la experiencia comienza y termina como la piensa el usuario. Aporta la información, las conexiones, el seguimiento y todo cuanto el viajero piense necesitar en cuanto a seguridad.
El objetivo es que “las comunidades y los hoteles todo incluido se beneficien de la actividad turística y de todo el movimiento económico que genera la industria”, señala Michelle.
Y llega la fundación
Pero los chicos quieren hacer mucho más por el desarrollo de las comunidades y el turismo responsable. Lo harán a través de la recién creada fundación Nateevos.
La fundación, dice Giancarlo, viene a formar parte de ese ecosistema que están creando con los tres emprendimientos.
“Nace para conectar canales y ayudar a esos locales que ya tenemos identificados, que vienen creciendo, que tienen buen flujo y la oportunidad de crecer e impactar a su comunidad”.
Nicolás agrega que durante las excursiones ven mucha falta de educación en todos los niveles de la actividad turística: educación financiera, de moral y ética y educación ambiental.
“Y nos preguntamos: ¿cómo nosotros podemos subsanar un poco el tema técnico de la educación sin ser Gobierno? A través de la fundación”.
¿De qué forma? Contemplan llevar infraestructura y capacitación a esas comunidades. Un ejemplo de capacitación simple, dice Nicolás, es impartir inglés técnico enfocado en el ambiente en el que se desenvuelven.
“Necesito que el local sepa darle la mano a un turista de cualquier país y decirle sígueme, agáchate ahí, coge esa cuerda o sube esa escalera”. A nivel de infraestructura, “necesito crear senderos señalizados, con zafacones, con asientos, con entrada y salida. Eso viene a hacer la fundación, a canalizar esos trabajos”.
Tres comunidades fueron escogidas para el plan piloto: Los Cacaos (San Cristóbal), Blanco (Monseñor Nouel) y Jamao al Norte (Espaillat).
Para ello tomaron en cuenta las facilidades de acceso y el auge que está tomando el ecoturismo en estos destinos.