Con el auge de las redes sociales, se ha vuelto muy común mostrar públicamente los lugares que visitamos en nuestros viajes turísticos. La red social por excelencia para este tipo de «postureo» es Instagram, ya sea con publicaciones tradicionales, vídeos o las populares stories. Pero muchos usuarios embellecen sus destinos y paisajes con diferentes filtros e incrementando la saturación de los colores, con lo cual a veces representan una imagen un tanto distorsionada de la realidad.
Para poner de manifiesto las diferencias, un usuario de TikTok ha publicado una serie de vídeos en los que compara las publicaciones de viajeros con imágenes sin adulterar y sin filtros de los mismos lugares. Además, en muchos casos también se nos muestran estos espacios turísticos como si sus protagonistas influencers estuviesen solos disfrutando de ellos, cuando en realidad suelen estar masificados y abarrotados de turistas. En definitiva, en estos vídeos podemos apreciar que, aunque sin duda se trata de sitios muy bellos que vale la pena visitar, no siempre son el paraíso que parecen reflejar las redes sociales.
En este vídeo podemos ver lugares como Nueva York, China o la isla griega de Santorini. En las publicaciones originales parecen muy idílicos, pero en la vida real están llenos de gente, abunda el barro o sus colores no son tan llamativos. Esta cuenta tiene ya más de 800.000 seguidores en TikTok, y ha publicado diversos vídeos con el mismo formato, poniendo el foco en diferentes lugares turísticos del planeta.
En este otro vídeo, observamos lugares como Petra (Jordania) o Hoi An (Vietnam). De nuevo vemos los espacios mucho más masificados en las versiones «reales», y los colores no son tan de fantasía. Llama especialmente la atención ese verde tan intenso que cubre el lago, comparado con el tono anaranjado de la realidad.
Y vamos a poneros un vídeo más, en el que aparecen destinos como el parque de Lençóis Maranhenses (Brasil) o la isla de Mauricio. Una vez más, vemos cómo los colores cambian sustancialmente y los sitios parecen un tanto diferentes.
Estos vídeos han generado muchos miles de comentarios de otros usuarios como respuesta. «Menuda estafa entonces«, o «el problema con los vídeos de redes sociales es que sobresaturan el color y luego no se ve así«, exponen. Sin embargo, muchos también señalan que buena parte de las diferencias se deben a que son imágenes tomadas en diferentes épocas del año, cuando el clima es diferente, y la afluencia de turistas también puede ser mayor o menor, e incluso aseguran que algunos de los lugares comparados ni siquiera son exactamente los mismos.
Además, son muchos los que afirman que estos lugares, o al menos muchos de ellos, siguen siendo muy bonitos también en los vídeos «reales», y que no se les quitan las ganas de visitarlos. En cualquier caso, comparativas como estas pueden venir muy bien para poner los pies en el suelo y hacernos una idea más realista de lo que nos vamos a encontrar, que en muchos casos no necesita de filtros ni saturación de color para ser un destino exótico muy válido.