SANTO DOMINGO.- La capital de la República Dominicana continúa su crecimiento vertical y vive lo que sin lugar a dudas es un «boom de la construcción», a pesar de los altos precios de los materiales, al aumento del costo de la mano de obra y otros inconvenientes.
Gracias a un esfuerzo conjunto de los sectores público y privado, la ciudad ha registrado en los últimos tiempos una extraordinaria transformación física que se manifiesta en cientos de torres de apartamentos y otras edificaciones de diseño moderno que han sido levantadas.
En estos momentos, no hay un sólo sector de la ciudad en donde no se esté realizando una construcción. Por doquier se observan edificaciones multifamiliares de sobresaliente arquitectura y decoración, en las que se combinan elementos dominicanos y conceptos importados, con lujo y exquisitez.
La gran cantidad de torres ha hecho romper el criterio de «viviendas unifamiliares» que prevaleció durante largo tiempo.
Entre los sectores que cuentan con mayor cantidad de edificaciones altas y de lujo figuran Los Cacicazgos, Piantini, Evaristo Morales, Serrallé, Naco, El Millón, Urbanización Fernández, Bella Vista, La Esperilla, El Vergel y Quisqueya.
El más alto edificio sigue siendo la torre Anacaona 27, ubicada en el sector Los Cacicazgos en la avenida que lleva este mismo nombre, frente al restaurant Lago Enriquillo. Su altura es de 171 metros 41 pisos. Es la edificación de mayor altura en el Caribe y una de las más lujosas de América Latina.
Torre Caney
Hasta hace poco el récord de altura lo tenía la torre Caney, de 38 niveles, ubicada también en la avenida Anacaona, frente al parque Mirador. Tiene una altura de 150 metros y 38 apartamentos, uno por piso
En esta misma avenida han sido levantadas otras torres de gran altura, que dejan en el visitante la impresión de que Santo Domingo es una ciudad moderna y de lujo.
También en Santo Domingo Este
El ímpetu en la construcción de torres se deja sentir también con fuerza en Santo Domingo Este, donde en los últimos años han sido levantadas varias de ellas con una inversión millonaria, la cuales están cambiando la fisonomía de esta importante provincia.
Calles remodeladas y arborizadas
Paralelamente, en los últimos meses las principales avenidas de Santo Domingo han sido reacondicionadas con el fin de agilizar el tránsito. Muchas de ellas han sido dotadas de carriles especiales para que los vehículos puedan doblar a la izquierda, sin entorpecer a los que vienen detrás. También casi todas las isletas de las mismas han sido embellecidas con palmeras y otros árboles, los cuales imprimen a éstas un agradable aire tropical.
La ciudad tiene ahora casi todas sus calles asfaltadas, bien señalizadas y con abundante iluminación, lo que ha ayudado a agilizar el tránsito.