Cuando la directora de origen dominicano Gabriela A. Moses planteó su ópera prima, «Boca Chica», tenía claro que su deber era hacer cine reivindicativo, que llegara al corazón del público, y se puso manos a la obra con una historia dura pero real: la de la vida de una niña de 12 años envuelta en una trama de turismo sexual.
Directora, escritora y diseñadora de producción nacida en Nueva York de padres dominicanos, ha podido llevar su primera película a la competición de la sección oficial del Festival de Huelva de Cine Iberoamericano, en España, tomando como un personaje secundario la playa de Boca Chica, un paraíso dominicano “que también es un infierno para Desi”, la niña protagonista.
La directora explica a EFE que el estreno en Huelva de la película el sábado fue algo sorprendente, gracias a la fórmula que usa este festival, que permite al público hablar con el equipo al terminar la proyección, “y fue algo muy emocionante ver cómo nos felicitaban y nos preguntaban cosas de la película nada más verla”.
Moses tiene cuatro cortometrajes a sus espaldas y defiende que el cine tiene que ser reivindicativo, porque tiene claro que es «una artista y una artista es una activista también”.
Además de que “los temas de la película son muy importantes para decir algo y empezar una conversación sobre lo que está sucediendo con las niñas y el turismo sexual en el Caribe y en varias partes del mundo”.
«Es un tema muy fuerte para mi ópera prima, pero muy necesario”, según la directora, que tiene mucha experiencia, a pesar de su juventud (33 años), en el trabajo con niñas.
Aunque no era la guionista, tuvo libertad para agregar al guión lo que iba viendo como necesario, “con diferentes escenas y detalles con las guionistas y con el permiso de la productora”, Sterlyn Ramírez, de Celine Films.
«Boca Chica», como muchas películas dominicanas, es fruto en parte de la Ley del Cine que funciona en el país caribeño desde hace más de diez años, “que hace que ahora tengamos una edad dorada” para los cineastas de este país, según Moses.
En ese contexto, tiene en mente un guión sobre una niña negra con albinismo, y está en proceso de “encontrar esta estrella” para sacar adelante la película.
«Boca Chica» será estrenada en el país de la directora el próximo enero y confía en que triunfe, porque su meta fue «mostrar los diferentes lados de la realidad” y lanzar un mensaje “sobre el sueño de una niña y su dolor, porque hay oscuridad sobre lo que está pasando en esta parte, la del turismo sexual”.
En la película se aborda la situación de las menores en República Dominicana, la cara oculta del turismo de paisajes idílicos y las imposiciones familiares y expectativas sociales de los jóvenes en su paso a la edad adulta.
«Boca Chica» obtuvo el Premio Norah Ephron en el Festival de Tribeca, al que da nombre este barrio de Nueva York. (EFE Huelva, España, Fermín Cabanillas).