Miriam eligió a la República Dominicana para pasar sus vacaciones por tercera vez junto a su familia desde la ciudad de Guanajuato, México. Su sonrisa de alegría cambió a una de sorpresa cuando se enteró que era de las primeras visitantes en estrenar el puerto de Cabo Rojo, en plena inauguración.
«¿A cuántas horas estamos de Santo Domingo?» preguntó al ser abordada por Diario Libre. «Wow, entonces a Punta Cana es mucho más tiempo», estimó, tras escuchar que se encontraba a casi seis y ocho horas de los dos únicos destinos que conoce en el país.
La turista, que solo se identificó con su primer nombre, vino a bordo del Norwegian Pearl Cruise, la primera embarcación que atracó en el puerto Cabo Rojo de Pedernales, con 2,557 cruceristas a bordo.
La empresa naviera estaba previamente informada de que sería la primera en llegar a este puerto, en el que, además de atender a los excursionistas, el presidente Luis Abinader inauguraba formalmente su primera fase junto a otras autoridades, de acuerdo a la directora jurídica del Grupo ITM, Carla Desentis, quien dijo que la naviera llegó a comunicarles esto a sus pasajeros.
Sin embargo, entre los que desembarcaron había quienes desconocían que llegaban a un puerto nuevo o que se encontraba presente el primer mandatario del país, junto a otras autoridades del Gobierno.
«Apenas lo supimos en los últimos minutos», expresó Andrew, un visitante que se trasladó desde Toronto, Canadá, junto a su esposa, Gehna, y que contrató una excursión en una lancha barbecue para conocer por primera vez a Bahía de las Águilas, un atractivo que ya se encontraba incluido en su paquete de compra.
«Cuando yo reservé, había un puerto diferente. Y luego, hace unos meses ellos (la compañía) lo cambiaron. Y cuando comenzamos a investigar nos dimos cuenta de que seríamos el primer barco en el puerto», explicó Marcia Miller, quien se trasladó desde Tennessee, Estados Unidos.
El crucero salió desde Miami, Florida, el día 2 de enero y desembarcó alrededor de las 10:30 de la mañana del día de ayer, con un itinerario para permanecer en Cabo Rojo hasta las 7:00 de la noche.
Este viernes estará por Isla Catalina, en La Romana, y partirá luego al puerto Oranjestad, en Aruba. Desde ahí continuará una ruta por el Caribe, pasando por Curazao, Bonaire, Tórtola y Puerto Rico, desde donde regresará al puerto de Miami el 13 de enero.
En un acto simultáneo a la llegada del crucero, el presidente Luis Abinader encabezó la inauguración de la primera fase del Puerto Cabo Rojo y, en ese escenario, proclamó que a partir de ese momento «el despegue del sur es imparable».
«La llegada de los cruceristas a nuestra isla no solo implica un incremento en el turismo, sino también la oportunidad de impulsar el emprendimiento local», puntualizó el mandatario.2,557
cruceristas llegaron a Cabo Rojo a bordo del Norwegian Peal Cruz ayer en Pedernales.
En esta primera fase han quedado habilitados 200 metros de muelle, extensible hasta los 400 metros, con un puerto de amarre y pilotes con una profundidad de 40 metros de profundidad y unos espigones lineales de 260 metros.
El director ejecutivo de Grupo ITM, Mauricio Hamui, informó que el puerto tiene la capacidad actual de recibir dos cruceros tipo oasis -la clase de embarcación más grande del mundo- de manera simultánea.
Abinader recordó que la primera fase del puerto forma parte del Proyecto de Desarrollo Turístico de Pedernales, un megaproyecto que apenas se encuentra en la primera de cuatro fases que estarán listas a 10 años y para lo cual se proyecta una inversión de 2,245 millones de dólares en ese período.
Hasta ahora, el Gobierno estipula que ya ha invertido 26,000 millones de pesos en Pedernales, y ha creado más de 1,800 empleos directos e indirectos, informó el director general de Alianzas Público-Privadas, Sigmund Freund, quien agregó que «ya se siente» el dinamismo económico en la región sur fruto de estos esfuerzos.
El director de Autoridad Aeroportuaria (Apordom) confirmó a Diario Libre que el Gobierno proyecta la llegada de hasta un millón de cruceristas por Port Cabo Rojo para el 2028, mientras que se espera recibir unos 250,000 excursionistas para el 2025, según el director de ITM Group, Mauricio Hamui.
Ante estas cifras, el presidente Abinader dijo que el Gobierno proyecta «un impacto económico en la zona de millones de dólares, 3,000 empleos directos y más de 10,000 indirectos.
«El denominado sur profundo se convertirá en un sur fecundo de desarrollo y empleos«, expresó Abinader.
Hasta ahora, la primera fase de la infraestructura portuaria tiene habilitadas dos piscinas, tres restaurantes en el centro y una zona de locales (souvenirs), un área de bienvenida (welcome area), así como sus zonas de servicios: baños, andadores y la zona de salida.
Aunque todavía son visibles grúas, herramientas de trabajo, escombros y residuos de construcción a los alrededores del puerto, la directora ejecutiva del Grupo ITM confía en que las áreas de recreación listas en el puerto, sumada a la belleza natural del destino, hará que los turistas disfruten de su estancia sin reparar en ello.
La inauguración y el despegue del puerto y su entorno
Con el rompimiento de una botella lanzada hacia una roca, envuelta en un paño blanco, similar a la botadura de un nuevo barco, el presidente Luis Abinader dejó inaugurado al mediodía de ayer la primera fase del Puerto Cabo Rojo en Pedernales, que más temprano recibió la llegada de 2,555 turistas, a bordo del barco Norwegian Pearl, de la línea Norwegian Cruise.»¡El despegue del sur es imparable!», exclamó Abinader durante su discurso inaugural, acompañado de su esposa Raquel Arbaje y su hija Adriana Abinader, quienes visitaron el lugar con él una semana después de tomar posesión como presidente de la República, el 16 de agosto del 2020.Según Abinader, la llegada de los cruceristas no solo significa un incremento del turismo, sino un generador de empleos e impulso al emprendimiento local.Recordó que el desarrollo de Pedernales (una de las provincias más pobres del país) está concebido en cuatro fases, en un periodo de unos ocho años, con una inversión estimada en 2,245 millones de dólares. «Hoy es el comienzo del cambio en toda la región», insistió Abinader durante su discurso.
«Hemos preparado mucho, y nos hemos preparado como personal para que, precisamente, esos pequeños detalles de obra que todavía se ven pasen desapercibidos. Lo importante es que los turistas disfruten, el personal está capacitado y Pedernales es disfrutable, independientemente del tema de la obra», acotó.
Aseguró que los turistas fueron informados por la línea de cruceros de que estaban asistiendo a un destino emergente, el cual ofreció excursiones hacia destinos como el centro de la ciudad de Pedernales, Bahía de las Águilas, el Hoyo de Pelempito y la laguna de Oviedo, entre otros lugares, para los cuales se coordinó la disponibilidad de lanchas, boogies y minibuses con transportistas de la región.
Cómo desarrolladora y gestora portuaria, al Grupo ITM le costó unos ocho meses completar la construcción de este puerto. Desentis prevé que aún hace falta un año y medio para completar el puerto de Cabo Rojo en su totalidad.