“Si lo que está pasando en tierra es grande, lo del mar es desgarrador. Si seguimos como vamos nos quedaremos sin nada de nuestros recursos naturales. La pesca indiscriminada y la tala de árboles sin control están acabando nuestro entorno”, expresó Regalado Burgos, alcalde pedáneo de la comunidad Buen Hombre.
La Playa de Buen Hombre, en la comunidad costera que lleva su mismo nombre, el azul del Océano Atlántico y las montañas norteñas, es lo llamativo de turistas que la visitan y disfrutan de su belleza, además es un lugar ideal para el kitesurf y la pesca.
Burgos con su experiencia de 24 años también como buzo, quien también trabajó con una comisión de los Estados Unidos por dos años, descubrió irregularidades alarmantes. Entre ellas se encuentran el corte de corales y la pesca destructiva, prácticas que él define como amenazas marinas que incrementan la pérdida de miles de peces, entre otras especies.
El alcalde relató que en estas aguas habita una gran variedad acuática como el chucho, la raya, tiburones, manatíes y ballenas. Las ballenas, en particular, realizan una trayectoria desde aquí hasta Samaná durante seis meses, viniendo a aparearse antes de regresar con sus crías.
Esta rica biodiversidad está en grave peligro debido a las malas prácticas humanas.
“Esto es una zona que está en desarrollo turístico, pero si seguimos así no tendremos nada que brindarles a los turistas. ¿Qué les mostraremos? Una zona destruida y arruinada por las malas prácticas de personas irrespetuosas que están destruyendo nuestro entorno natural”, lamentó Burgos.
Un experto biólogo marino, quien pidió omitir su nombre por temor a represalias, y a quien llamaremos «José» para poder desarrollar sus declaraciones, ha destacado cómo las talas de árboles están afectando gravemente a la biodiversidad marina en la región de Buen Hombre.
José indicó que las actividades en tierra tienen impactos significativos en el mar. En el caso de Buen Hombre, la protección de los bosques secos y la gestión sostenible son cruciales para la conservación de los arrecifes de coral y la biodiversidad marina en general.
«La deforestación o pérdida de la cobertura vegetal desestabiliza el suelo», explicó José. Sin la vegetación, el suelo se vuelve más propenso a la erosión. Durante las lluvias, este suelo erosionado se transporta a los ríos y finalmente llega al mar, donde se deposita en los arrecifes de coral.
Expone que esta sedimentación puede sofocar los corales, bloquear la luz solar necesaria para la fotosíntesis de las algas simbióticas (zooxantelas) que viven en los corales, y reducir la calidad del agua, lo que afecta negativamente a la salud del ecosistema de coral.
Degradación arrecifes
Los arrecifes coralinos constituyen por su extensión, un ecosistema de importancia para el país y el eco-región del Caribe. Para la isla Hispaniola forman la primera barrera de protección de la costa norte contra las fuertes corrientes provenientes del Océano Atlántico.
Estos ecosistemas están estrechamente relacionados con los demás biotopos neríticos presentes en la plataforma que se extiende hacia el Nordeste, tales como pastos marinos, manglares y playas arenosas.
Los sistemas arrecifales están, casi en su totalidad, ubicados dentro de los límites de espacios protegidos actuales de la provincia.
Investigación
Tras una investigación realizada por esta reportera, se ha confirmado que diversos estudios describen la degradación de los arrecifes de coral en la zona, asociada a niveles de sobrepesca y otras causas. La recuperación de estos arrecifes es lenta o incluso imposible si no se restablecen las condiciones necesarias mediante la implementación de buenas prácticas pesqueras.
El estudio «Evaluación Ecológica Rápida (EER) de los Arrecifes de Coral en el Parque Nacional Submarino Montecristi» reveló que la zona de Buen Hombre y las áreas circundantes mostraron las mejores condiciones de conservación, manteniendo aproximadamente el 90% de su vegetación original.
Este hallazgo es significativo, ya que destaca la importancia de la región como un refugio para la biodiversidad marina y terrestre.
La evaluación de la vegetación y la flora en el entorno de la franja costera de la provincia de Monte Cristi, desde Manzanillo hasta Buen Hombre, identificó ocho tipos de vegetación: bosques secos, saladares, manglares, vegetación sobre dunas, vegetación palustre (humedales) y vegetación introducida (asociada a cultivos).
Se registraron 203 especies de plantas vasculares, de las cuales 25 son endémicas de la isla Hispaniola. Entre estas especies, varias son raras y podrían estar amenazadas debido a su ubicación en áreas frágiles, de difícil acceso y con escasa vigilancia. Entre ellas se encuentran Coccoloba leoganensis Jacq, Coccoloba krugii Lindac, Coccoloba ceibensis, Coccoloba nodosa y Boretia daphnoides, observadas principalmente en el bosque seco en transición con el húmedo.
La zona también alberga especies de plantas protegidas por la legislación nacional o por acuerdos internacionales, como el Guayacán (Guaiacum officinale), la Vera (Guaiacum sanctum) y las cuatro especies de mangles. Aunque predominan las especies de plantas arbustivas y herbáceas, también se identificaron numerosos árboles, aunque con categoría de arbustos debido a las condiciones de los sustratos en los que crecen, que solo benefician a las especies del ecosistema del manglar por sus condiciones de salinidad.
Daños
El alcalde de Villa Vázquez, Jenrry Castro, afirmó que la zona enfrenta una sedimentación extraordinaria que está arrasando con la biodiversidad marina y transformando el paisaje costero.
«La sedimentación está bajando de la loma debido a la depredación de las mismas. Esta área solía ser un lugar de baño lleno de almejas, pero ahora las almejas se han extinguido», declaró Castro.
Señaló que la erosión intensa está arrastrando rocas y lodo desde las montañas, cubriendo la playa y haciéndola prácticamente inservible.
«Todo esto afecta enormemente, y ese lodo también llega a los corales», añadió.
El alcalde explicó que los corales, que sobresalen de la costa y forman una de las barreras de coral más grandes del país, están muriendo debido a la falta de peces y la pesca indiscriminada.
«Como no hay peces en los corales, ahora se están llenando de algas. La luz solar no puede llegar a los corales, lo que está causando su muerte. Esta barrera de coral, que actúa como un gran rompeolas, está en riesgo de desaparecer», alertó.
“La desaparición de los corales tendría consecuencias devastadoras. Al morir los corales, la barrera que protege la costa se resquebraja y se destruye, dejando la playa vulnerable a las olas grandes y la marea. «Esto no solo provoca una gran sedimentación en la playa, sino que también amenaza con eliminar por completo esta barrera protectora», indicó Castro.
El alcalde hizo un llamado a la acción urgente para proteger este ecosistema frágil. «Queremos llamar la atención sobre esta belleza, este paraíso que tenemos que proteger a toda costa. Si no actuamos ahora, nos quedaremos sin playa», concluyó.
Actividades que se hacen en la playa
Esta playa tiene el mejor viento de El Caribe para practicar Kite y uno de los mejores vientos del mundo, agua plana que te permite aprender ese deporte en menor tiempo posible que en cualquiera del planeta.
Los turistas que visitan la zona dicen sentirse preocupado, como es el caso de la empresaria extranjera Riin Urbanik, propietaria de la escuela de Kitesurf, quien dice quiere que se desarrolle la zona pero de manera amigable con el medio ambiente.
Visita de los turistas
Según explican los residentes del lugar, el flujo de turistas últimamente está un poco lento, a lo que ellos lo atribuyen a la poca acción de las autoridades los cuales no están colaborando para erradicar el mal que le afecta a dicha comunidad.
Indican que a pesar de eso aún vienen de Europa, Estados Unidos y de Canadá, y de otros lugares del que han descubierto el potencial que tiene la playa para el Kitesurf. Pero esto pudiera desaparecer, debido a que le están quitando el atractivo a la zona.
Nivel de la pesca
Según David Villa Nueva vicepresidente de la Asociación de Pescadores Guardianes Marinos de Buen Hombre, (Asopecuama), califica como preocupante la situación debido a la pesca indiscriminada.
«Hemos sacados de aquí cientos de chinchorros, los cuales estaban en el fondo del mar matando los peces». Dice que como quiera siguen matando las especies y que han encontrado varias especies muertas y menciona el caso del Carey.
«Aquí ya no hay peces. Nos han quitado nuestra fuente de empleo por más de 30 años, nuestro sustento», afirmó.
Explicó que para encontrar peces, ahora deben aventurarse muy lejos, ya que en las aguas de esta playa ya no existen. Esta situación ha llevado a muchos pescadores a enfrentar dificultades económicas y a buscar trabajo en otras áreas, alejándose de sus comunidades y tradiciones.
La pesca indiscriminada y abusiva no solo ha agotado las poblaciones de peces, sino que también ha causado daños irreparables al ecosistema marino. «Esto afecta a todo el ecosistema», declaró.
Su vasta experiencia le ha permitido observar de primera mano los cambios drásticos y la degradación ambiental que han ocurrido con el tiempo.
Llamado a la sociedad
Los comunitarios de la zona hacen un llamado a que cuiden los recursos naturales, recuerdan que el mundo está luchando con el calentamiento global y el efecto invernadero. «Con este cambio climático que está provocando tanto daño, ahora mismo estamos experimentando grandes sequías en lo que es Latinoamérica». Agregaron.
Como llegar a la playa
Esta playa se encuentra a unos 30 kilómetros de la carretera Duarte en el distrito municipal de Villa Vásquez, provincia Montecristi, atravesando la cordillera Septentrional.
La comunidad de Buen Hombre es un pequeño pueblo de pescadores, cuenta con 8 kilómetros de costa, que presentan una extensa variedad de ecosistemas marinos incluyendo archipiélagos, hierbas marinas, manglares, playas arenosas y los arrecifes de coral.
Es conocida popularmente como las costas. Sus principales playas son playa Buen Hombre, que es bahía de los pecadores, playa La Punta del Muerto, playa De Luz que es playa Las Mercedes, playa Punto Piedra, playa Boca Vieja, La Posa, Los Cocos y El Paisano. Cuenta con hoteles, restaurantes, bares, discotecas, pescaderías, entre otras.
En parte de la orilla del mar hay pantanos y mangles. Entre las especies frutales, son uva de playa y limoncillos. Entre las especies de la fauna está el mariguan, una iguana pequeña, la garza, el cucu, una variedad de cigua y paloma, entre otra. La cálida temperatura oscila entre los 26 y los 33 ºC, aunque en los meses fríos baja hasta 15 ºC.
ONU
Se recuerda que el pasado 17 de Julio, el Secretario Ejecutivo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para el Cambio Climático, Simon Stiell, a través de una nota informativa de la agencia internacional EFE, hizo un llamamiento a los gobiernos de todo el mundo para que “vuelvan a dar prioridad a la acción por el clima en sus agendas” con el fin de enfrentar los efectos de la crisis climática.
“Si no dan un paso al frente, todas las economías y 8.000 millones de personas se enfrentarán a este mismo trauma de manera continua”, dijo.
Según Stiell, las tormentas “nunca han sido tan potentes ni tan frecuentes, las inundaciones tan repentinas y destructivas, los incendios y sequías tan devastadores y costosos a corto y a largo plazo”, por lo que “los colosales costes climáticos han alcanzado el nivel de grave amenaza para la seguridad nacional de todos los países”. Dijo Simon.
El coste de la inacción
El secretario Ejecutivo de la ONU ha hecho referencia a un informe reciente según el cual sólo la factura económica de la inacción climática aumentaría hasta los 38 billones de dólares anuales de aquí a 2050, mientras que la acción climática costaría menos de una sexta parte de esa cifra.