Cuando se habla de turismo, por lo regular se hace referencia a la cantidad de turistas que llegan a un país. Es entendible, es la cifra que se vende al mundo y que refleja la popularidad de un destino. Sin embargo, se trata del número más superficial del sector. Lo realmente importante es el gasto o consumo que dejan esos viajeros a su paso.
En República Dominicana se alcanzó los “diez millones de visitantes” en 2023, no obstante, apenas unos ocho millones llegaron vía aérea, es decir, aquellos que pernotan o se hospedan en alojamientos dominicanos. Esos son los que adquieren bienes y servicios. De ahí que se cuestione la rentabilidad de los cruceristas.
Durante el 2023, de las 8,058,671 personas que ingresaron al país por los aeropuertos, 6,730,802 eran extranjeros y 1,327,869 dominicanos no residentes. Aun así, en su conjunto, estos turistas permitieron a la industria turística generar más de US$9,751.0 millones el año pasado, aunque desde el Ministerio de Turismo (Mitur) estimaban que los “10 millones de visitantes” generarían divisas por encima de los US$10,000 millones.
Incentivar compras
Para alcanzar y aumentar esos ingresos, desde la Asociación de Hoteles y Turismo de República Dominicana (Asonahores), plantean una iniciativa para fomentar el turismo de compras en el país mediante la implementación de una normativa que permita la devolución del impuesto a las transferencias de bienes industrializados y servicios (ITBIS) a los turistas.
La vicepresidente ejecutiva de ese organismo, Aguie Lendor, expuso a elDinero que una de las principales barreras para incrementar el consumo de los turistas en República Dominicana es la falta de incentivos fiscales. “Cuando un turista llega a España, todo lo que compra le permite recibir una devolución de los impuestos en el aeropuerto. Este incentivo no solo fomenta las compras, sino que también beneficia a hoteles, restaurantes, taxistas y operadores turísticos”, señaló.
La propuesta consiste en establecer un sistema similar al español, donde los turistas puedan recuperar el 18% del ITBIS de las compras realizadas durante su estancia, siempre y cuando se supere un gasto mínimo establecido. Lendor explicó que esta medida convertiría a República Dominicana en un destino más atractivo para los turistas de alto consumo, quienes no solo gastan en tiendas de lujo, sino que también invierten en servicios y experiencias locales.
Según la ejecutiva, la implementación de esta normativa tendría un impacto significativo en la economía local sin afectar negativamente al fisco. “Los turistas compran productos que luego llevan a sus países de origen, lo cual es similar a una exportación de bienes. En este contexto, no debería aplicarse el ITBIS”, argumentó.
América Latina y el Caribe
Este tipo de incentivo fiscal ya ha demostrado ser efectivo en otros países de la región. En Argentina, los turistas extranjeros pueden solicitar el reintegro del impuesto al valor agregado -IVA / Value Added TaX (VAT) por las compras de productos nacionales superiores a $70 efectuadas en comercios adheridos al régimen (identificados con el logotipo de Tax Free). El monto del IVA/VAT es del 21%.
Colombia es otro ejemplo. A través de un decreto, el Gobierno de ese país modificó las disposiciones que reglamentan la devolución del impuesto sobre las ventas (IVA) pagado en la adquisición de bienes gravados por parte de los turistas extranjeros. Adicionalmente, se redujo el gasto mínimo y en cambio se incrementó el tope máximo de devolución.
En Brasil, el Consejo Nacional de Política Financiera (Confaz) aprobó implementación del “tax free” en todo el país, una política de devolución de impuestos sobre productos en compras realizadas por turistas extranjeros.
En México, el importe de la devolución se paga en pesos mexicanos, mediante reembolso al medio electrónico de pago utilizado para la compra, o bien en efectivo hasta por un máximo de 50% del monto que debe pagarse al turista, sin exceder de 10,000 pesos.
El remanente se deposita de manera electrónica en la cuenta que se indique. Incluso en Uruguay existe un régimen de “Tax Free”, válida para compras de productos incluidos en el régimen. En Chile se denomina factura turista, que dará derecho a solicitar la devolución de impuesto.
La ejecutiva de Asonahores destacó que el turismo de compras no solo beneficiaría a las tiendas de lujo, sino que tendría un efecto multiplicador en otros sectores de la economía. “Este tipo de turismo trae consigo una serie de beneficios que incluyen la ocupación hotelera, el consumo en restaurantes, el uso de servicios de transporte y la contratación de “tours”. Todo esto contribuye a la dinamización de la economía local”, expresó.
Esta propuesta se impulsa en un momento en que marcas de lujo tienen cada vez más presencia en el territorio nacional, por lo que se busca convertir al país en un destino competitivo en el ámbito del turismo de compras, aprovechando su ubicación en el Caribe y su creciente oferta de tiendas y servicios de alta gama.
Propuesta
La devolución del impuesto para turistas extranjeros requiere cumplir con varios requisitos fundamentales. Primero, el turista debe demostrar su condición presentando su pasaporte extranjero con visado y la tarjeta de turista pagada.
Además, su estadía en el país no debe exceder los 90 días calendario y debe salir del país por vía aérea o marítima. Las compras deben realizarse en establecimientos afiliados y superar los US$75.
Esta iniciativa busca incrementar el consumo de productos locales por parte de los turistas, beneficiando así al sector turístico dominicano y al comercio local.