Por: www.eldinero.com.do / Edición impresa #215
En República Dominicana operan excelentes aerolíneas con matrícula nacional. Desde la creación de la primera empresa de transporte aéreo, en la década de los 40, el país ha vivido épocas interesantes en este sector, las que, sin embargo, se han visto afectadas por la mala gestión, el tráfico de influencias o amiguismo creador de déficits operacionales, y por la falta de conciencia respecto a la importancia de aprovechar las ventajas de ser un destino turístico y de negocios.
Penosamente hay que decirlo: en la medida en que el turismo se fue fortaleciendo y la democracia alcanzó mejores niveles de madurez, República Dominicana descuidó su línea bandera nacional. Hoy, lastimosamente, el país no puede alzar ni pregonar en los escenarios internacionales lo que sí pueden hacer otras naciones del continente: presentar su línea aérea con capacidad para aprovechar gran parte del pastel que ofrece el transporte de pasajeros.
Brasil, Argentina, Colombia, Perú, Chile, Bolivia, Costa Rica, México, Panamá y otras naciones, pueden aprovechar mejor sus características particulares como destino porque tienen desarrolladas líneas aéreas, algunas con capacidad para competir en cualquier mercado.
En el caso dominicano, salvo las excepciones que han logrado sobrevivir por iniciativa del sector privado, se ha perdido la oportunidad de movilizar millones de pasajeros desde y hacia los destinos emisores de turismo. Sólo habría que imaginarse lo pintoresco que sería traer turistas a suelo dominicano en una línea aérea netamente nacional, agregando el valor cultural en todas sus manifestaciones. Sería como adelantarle a nuestros visitantes algo de lo que será su experiencia una vez pise tierra quisqueyana.
Lo positivo del paso del tiempo y de la apertura del espacio aéreo dominicano es que, de todos modos, la afluencia de turistas o visitantes para cualquier motivo se ha ido incrementando en el país. Al analizar datos del IDAC, se evidencia que la llegada y salida de pasajeros por los aeropuertos del país cada año rompe su propio récord.
Producto de la incidencia del sector privado y empresas internacionales, desde 1995 hasta 2018, la llegada de pasajeros aumentó en un 289.4%, pasando de 1,854,417 a 7,221,780. En cuanto a las salidas, se incrementaron en un 287.9%, al pasar de 1,879,525 a 7,291,553. Sólo el año pasado se movilizaron 14,513,333 viajeros por los aeropuertos dominicanos.
República Dominicana cuenta con ocho aeropuertos internacionales. De acuerdo con datos de la JAC, a 2018 operaban 310 líneas aéreas, de las cuales siete son dominicanas. Air Century, Sky High Aviation Services, Pawa Dominicana, Servicios Aéreos Profesionales, Helicópteros Dominicanos, Aerolíneas Santo Domingo y Republic Flight Lines fueron las compañías que prestaban servicios a 2018. Si ya no está en planes del Estado tener una línea, como sí lo hacen otros países, lo mínimo que se puede esperar es apoyo a los empresarios del sector que apuestan por un desarrollo más amplio.