La convocatoria es un reconocimiento creado por la Organización Mundial del Turismo (OMT) y la Fundación ONCE.
Cuando el Jardín Botánico Nacional (JBN) abrió el Sendero de los Sentidos en 2014, la paraplejia no le impidió a María Carmen disfrutar al máximo la belleza del entorno de uno de los lugares más verdes y visitados de Santo Domingo. Fue creado y pensado para personas como ella.
Era también el primer espacio, tipo destino turístico, dedicado a las personas con discapacidad motora, visual y auditiva de República Dominicana.
Destinos y lugares como esos, que permiten que las personas con alguna discapacidad experimenten todas las emociones posibles en los espacios más diversos, están llamados a postularse al reconocimiento internacional Destinos Turísticos Accesibles (ATD por sus siglas en inglés).
La convocatoria fue lanzada la semana pasada por la Organización Mundial de Turismo (OMT) y la Fundación ONCE para la Cooperación e Inclusión Social de Personas con Discapacidad.
¿De qué se trata? Las bases de la convocatoria apuntan que serán reconocidas las comunidades “que realizan un esfuerzo importante para que su destino pueda ser disfrutado por cualquier turista, independientemente de sus capacidades físicas, sensoriales o cognitivas”.
Se aceptan todo tipo de destinos, señala la OMT en un comunicado: de sol y playa, de montañas, rurales, urbanos o dedicados a promover el patrimonio cultural.
La convocatoria tiene carácter internacional y periodicidad anual y las solicitudes deben enviarse a [email protected] hasta el próximo 30 de junio.
Los aspirantes deberán enviar, entre otros requisitos, “una memoria que aluda a los proyectos previos de accesibilidad y describa la situación actual del destino en esta materia”.
De acuerdo con la OMT, se tomará en cuenta la accesibilidad de aspectos como planificación, información previa y reservas, transporte de llegada y salida al destino, alojamiento, restauración, transporte urbano e interurbano en el destino, recursos turísticos y administraciones públicas de turismo.
