Ante la pandemia mundial de coronavirus que paralizó los viajes hace unas semanas, las autoridades hoteleras locales dicen que están viendo mucho interés en las estancias para las próximas vacaciones, sin mencionar la mayoría de los otros fines de semana.

«Hay una demanda reprimida», dijo Sharee Awwal, director de ventas y marketing de Arlo Hotels, propietario del Hotel Nautilus en la Avenida Collins 1825. Arlo, que atiende a una población milenaria, dijo que muchos clientes siguen reservando para viajes de ocio y celebraciones familiares. La mayoría vienen del noreste, con una mezcla de conductores y aviadores.

«Hicimos que una familia empacara en su camión Bentley y condujera desde Nueva Jersey», dijo. «Hay muchas ofertas en este momento».

Awwal fue parte de un panel de cerca de dos docenas de representantes locales de marketing y ventas de hoteles – todos enmascarados – convocados por la Oficina de Convenciones y Visitantes del Gran Miami en el Royal Palm Hotel de Collins Avenue. Los panelistas eran miembros del Grupo de Trabajo de Hoteles de la Ciudad de Miami Beach, convocado esta primavera para abordar el impacto de la pandemia en la industria del alojamiento.

La recuperación total sigue estando lejos. Los viajes internacionales, así como las visitas de negocios, convenciones y días de semana, siguen siendo muy limitados. Menos de 24 meses después de su apertura a una renovación de 620 millones de dólares, el Centro de Convenciones de Miami Beach ha puesto en marcha un grupo de trabajo de emergencia para atraer negocios de donde sea. Los frutos de ese esfuerzo han sido principalmente en salvar o posponer eventos para finales de 2020 o principios de 2021. Eso incluye la demostración de interiores de cruceros, trasladada a septiembre de 2020, y la convención de cómics de Supercon de Florida, trasladada al 2021.

Sólo hay que oler dentro de cualquier hotel local para entender la profundidad de las medidas que los hoteleros están tomando para que los huéspedes que regresan se sientan seguros del virus. Un visitante de uno de los hoteles Hyatt de Miami Beach puede sorprenderse al oler no un desinfectante, sino un desinfectante de manos con olor a coco, al llegar a ese destino de South Beach – un esfuerzo consciente para eliminar el potencial «olor a hospital». Mientras tanto, todo, desde bolígrafos hasta galletas, ahora viene envuelto individualmente.

A pesar de estos esfuerzos, nuevos datos de Oxford Economics y la Asociación Americana de Hoteles y Alojamientos muestran que Florida va a perder 1.300 millones de dólares en ingresos fiscales este año como resultado de la crisis de COVID-19. Los trabajadores ya han experimentado despidos temporales o permanentes de al menos 10.000.

Sin embargo, otros datos apoyan las historias de renovación sorprendente. Para la semana que terminó el 13 de junio, según el grupo de datos de viajes STR, la ocupación en Miami-Dade mejoró del 29,6% al 33,3% de la semana anterior, mientras que la tarifa diaria promedio mejoró a 110,82 dólares desde 94,64 dólares durante el mismo período. Los ingresos por habitación disponible subieron a 36,91 dólares desde 28,03 dólares.

Estas cifras siguen al resto de Florida, donde la ocupación mejoró al 41,5% desde el 37,7%, ADR saltó a 112,40 dólares desde 103,65 y RevPAR alcanzó 46,70 dólares desde 39,12.

Aún así, Rolando Aedo, director de operaciones de la Oficina de Convenciones y Visitantes del Gran Miami, dijo que ha habido un nuevo interés por parte de los viajeros que de otra manera podrían haber reservado para un destino en el Caribe. La agencia de desarrollo turístico público-privado ha estado apuntando a viajeros en mercados secundarios como Austin y Greenville, S.C., además de mercados tradicionales como Chicago. El CVB también ha comenzado a destacar las visitas a los parques nacionales de la zona para los visitantes que tal vez no se sientan todavía cómodos visitando espacios interiores.

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«No es una cuestión de demanda», dijo Aedo. «Miami Beach sigue siendo la envidia del mundo».

Al mismo tiempo, la Autoridad de Visitantes y Convenciones de Miami Beach, una autoridad de siete miembros nombrada por la Comisión de la Ciudad de Miami Beach para promover la ciudad, ha lanzado una campaña, «Desde Miami Beach, con amor» a través de los medios de comunicación social.

«Este es un momento difícil para todos, y esperamos dar la bienvenida a nuestros visitantes de todo el mundo tan pronto como podamos. Mientras tanto, seguiremos desarrollando nuevas formas de estar conectados y compartir la magia de nuestro destino», señaló Steve Adkins, presidente de la MBVCA.