Los tres principales fabricantes aeronáuticos del mundo, Airbus, Boeing y Embraer, han realizado diferentes simulaciones sobre el comportamiento del aire en cabina, considerando la arquitectura individual de cada avión, para llegar, cada uno, a esta misma conclusión, según han señalado en representantes de los tres grandes fabricantes en rueda de prensa; la exposición a la Covid-19 para los pasajeros es “muy bajo” a bordo de los aviones.
Según la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), desde comienzos de 2020 se han notificado 44 casos de Covid-19 en los que se cree que la transmisión ha estado asociada a un viaje de vuelo. En el mismo período han viajado unos 1.200 millones de pasajeros.
Los estudios señalan que “El riesgo de que un pasajero contraiga Covid-19 mientras está a bordo parece muy bajo. Con solo 44 casos potenciales identificados de transmisión relacionada con el vuelo entre 1.200 millones de viajeros, eso es un caso por cada 27 millones de viajeros”, ha apuntado David Powell, asesor médico de la IATA.
Aunque las metodologías de estudio de los fabricantes difirieron ligeramente, cada simulación detallada confirmó que los sistemas de flujo de aire de las aeronaves sí controlan el movimiento de las partículas en la cabina, limitando la propagación de los virus.
Así, entre las conclusiones destacan que los sistemas de flujo de aire de los aviones, los filtros de aire de partículas de alta eficiencia (HEPA), la barrera natural del respaldo, el flujo de aire descendente y las altas tasas de intercambio de aire reducen eficientemente el riesgo de transmisión de enfermedades a bordo.
Además, han insistido en que el uso de mascarilla abordo añade un ‘plus’ adicional y significativo de protección, que hace que estar sentado en la cabina de un avión sea más seguro que la mayoría de los otros ambientes interiores.