El turismo global, en zona de “alto riesgo” por el Covid

El turismo global, en zona de “alto riesgo” por el Covid
El turismo global, en zona de “alto riesgo” por el Covid

La pandemia puso en jaque a 300 millones de empleos del sector en todo el mundo y destruyó más de 150 millones. En Argentina, la actividad se contrajo 11,1 por ciento el año pasado y dejó sin trabajo a entre 150 mil y 170 mil personas, la mayoría mujeres y jóvenes. Córdoba no es una isla. Cómo se sale.

El turismo es uno de los sectores económico más dinámico a nivel global.

En algunas regiones del planeta, desde hace tiempo, apalanca la generación de empleo, sobre todo en segmentos que figuran al fondo de la tabla cuando de la creación de puestos de trabajo se trata, como el de las mujeres, el de los jóvenes y el de disidencias.

Latinoamérica en general y Argentina en particular están comprendidas en esa generalidad.

Sin embargo, la irrupción y la expansión agresivas del Covid-19 frenaron de golpe ese andar vigoroso y redujeron su pulso a un ritmo apenas de resistencia en gran parte del planeta.

La reactivación está comenzando en algunos lugares del mundo, como Copenhague, donde ya hay vuelos turísticos a destinos europeos. (AP)

Los efectos de la pandemia en las empresas vinculadas a la industria y sus trabajadores no tienen precedentes.

Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el aluvión infeccioso puso en jaque a más de 300 millones de empleos en el mundo como consecuencia de las medidas que se adoptaron con la intención de ponerle un dique a la peste.

La cifra calculada equivale a la totalidad de la población argentina multiplicada por seis, más o menos.

Teniendo en cuenta que, en 2019, el sector venía de generar (de manera directa e indirecta) alrededor de 330 millones de empleos en el orbe (aproximadamente el 10,3 por ciento del empleo total), se advierte la magnitud de la desgracia. Las cifras están destacadas en el informe de ese año del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés).

Gloria Guevara Manzo, presidenta y CEO de ese foro (el principal de los operadores del sector), recordó el registro en su disertación durante el seminario virtual “La recuperación de viajes y turismo, una perspectiva global”. La actividad estuvo organizada por la Federación Internacional de Asociaciones de Ejecutivas de Empresas Turísticas (Fiasseet).

Guevara Manzo cifró entre 150 millones y 190 millones los puestos de trabajo destruidos el año pasado por el coronavirus en las actividades involucradas en la industria, en todo el mundo. La estimación ajustada se conocerá pronto.

Sí se sabe que el mayor impacto lo sufrieron las micro, pequeñas y medianas empresas, con menos de 50 trabajadores, según precisó la ejecutiva. Ella remarcó, también, que más del 50 por ciento de la fuerza laboral que mueve al turismo global son mujeres.

Algunos visitantes ya disfrutan del sol en una playa griega del Mediterráneo, donde comenzó a abrirse el lugar al turismo. (AP)

El impacto en casa

En nuestro país, el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación reconoció a La Voz que la caída del empleo registrado en hoteles y restaurantes fue del 11,1 por ciento en 2020.

Matías Lammens, titular del organismo encargado de generar oportunidades de crecimiento y desarrollo en el rubro en cada rincón del país, encuentra consuelo en un imponderable: “la caída del empleo registrado en hoteles y restaurantes que se esperaba el año pasado era del 32 por ciento”, explicaron desde la oficina de prensa de la repartición. La merma de la debacle estimada se logró “gracias a la implementación de una batería de medidas focalizadas en dos aspectos: el auxilio y contención de la oferta (por un lado) y la reactivación de la demanda, por el otro”, argumentan los voceros.

Argentina. El turismo nacional siente el golpe de las restricciones. Mar del Plata es una de las ciudades más afectadas. (Télam)

Medidas de salvataje para evitar un naufragio total

“Para hacer frente a la mayor crisis de la historia del turismo, el Estado nacional incrementó en más del 500 por ciento el presupuesto para 2020, que pasó de 1.595 millones de pesos a 9.641 millones”, precisaron.

La Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (Fehgra) y la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés (Ahrcc) convirtieron el porcentaje del 11,1 en un número redondo para visualizar mejor la dimensión del daño a nivel nacional: 150 mil puestos de trabajo menos. A esta reducción del empleo, la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (Uthgra) la elevó a unos 170 mil. Quizá la informalidad endémica que caracteriza al sector explique la diferencia.

Unidos por el espanto

El espanto que les provoca la peste a las entidades empresarias y al sindicato de referencia, consiguió algo difícil de lograr en circunstancias ordinarias: que los tres actores se unieran en un mismo pedido de solución urgente al problema que comparten empresarios y trabajadores gastronómicos y hoteleros del país; con una advertencia: la salida del trance que los asfixia sin discriminar no puede ser la prohibición de la actividad. “Ese sería el tiro de gracia para todo el sector”, interpretan a coro.

mar del plata

Qué hacer para no desaparecer antes que el virus

La certeza hizo que la seccional Córdoba de Uthgra difundiera un comunicado en rechazo de “las medidas de empobrecimiento y restricciones de libertades decretadas por el gobierno nacional y acompañadas por el gobierno provincial”, ni bien se conociera el detalle del confinamiento estricto que regirá en casi todo el país hasta el domingo próximo.

“Esas disposiciones no solucionan en nada la situación epidemiológica que no supieron gestionar y provocarán más desocupación, desesperación, menos educación y menos salud al pueblo, fundamentalmente para nuestros trabajadores y para los más vulnerables”, clamó Juan Carlos Rousselot, secretario interventor del gremio gastronómico local.

El dirigente cifró en un centenar la cantidad de hoteles que cerraron en Córdoba debido al quebranto que les provocó la pandemia, entre los que destacó el caso del Sheraton, el último cinco estrellas que ofrecía Córdoba a los visitantes con mayor poder adquisitivo.

“Con relación a bares y restaurantes, los que bajaron definitivamente las persianas por la crisis son alrededor de 600 establecimientos, retrotrayendo el nivel de actividad a 40 años atrás”, lamentó el sindicalista.

“Somos un espacio seguro para trabajar. No somos foco de contagio, sino una fuente enorme de empleo”, plantean al unísono empresarios y trabajadores ligados al turismo en el comunicado conjunto.

“Ya cerraron más de 10 mil establecimientos y se perdieron alrededor de 150 mil puestos de trabajo” recuerdan. Y advierten: “Están en riesgo otros 200 mil, gran parte de ellos, jóvenes de entre 18 y 24 años que hacen su primera experiencia en el mundo laboral dentro del sector hotelero y gastronómico”

Cuando se supere la pandemia se sabrá con más precisión cómo impactó en la industria del turismo y qué hacer para recuperar al sector; uno de los más dinámicos de la economía global y palanca importante en la creación de empleo.