Por Monserrat Soto /DePaseo
Seguro que has comido casabe aunque sea una vez en la vida. Solo, con aguacate, alguna salsa o dip o hasta con buche de perico, este es un producto muy amado, sobre todo por su sabor neutro. ¿Sabes de dónde viene la palabra “casabe? Esta proviene del término arahuaco “cazabi” que significa pan de yuca.
Este puede ser consumido en cualquier comida del día, al desayuno, almuerzo, inclusive como plato principal, entrada, postre o simplemente para picar.
El casabe es una rica, crujiente y delgada torta de harina de yuca. Se dice que el casabe dominicano es saludable porque sirve como pan dietético, pues no contiene colesterol, ayuda al metabolismo por su alto contenido en fibras y no tiene sal. Por su sabor neutro es ideal para acompañarlo con cualquier tipo de comida. Este soporta la incorporación de otros ingredientes que van desde la cebolla hasta el maní.
La yuca es un tubérculo originario de América, y el principal cultivo de la época precolombina. Los primeros indígenas provenientes del norte de Sudamérica comían la yuca cruda y morían de inmediato debido a los grandes niveles tóxicos que poseía este alimento.
Gracias a su delicioso sabor fue inevitable dejar de comerla, así que decidieron realizar experimentos y encontraron que asada o guisada eliminaban lo tóxico, también dedujeron que el veneno estaba en el líquido y tras disecarla y transformarla, descubrieron que con ella podían hacer harina de yuca, principal ingrediente del casabe, un pan más saludable que el de trigo.
La realización de las tortas de casabe dominicanas lleva un ardo proceso desde las cosechas de la yuca amarga, rayarla y convirtirla en grandes tortas finas y crujientes para disfrutar en exquisitos platillos o incluso sin acompañamiento.
El hecho de ser un producto 100% natural que aporta hidratos de carbono en abundancia, permite que sea un alimento que brinda mucha energía. El casabe tiene 9% de fibra.