Cada vez que el turismo medio logra niveles de máxima calidad y sofisticación, el turismo de élite ha de buscar modelos aún más exclusivos. Esto es lo que anuncian Moti Engelman y Uri Argov al crear la marca RoadRunAir, un nuevo concepto operativo del turismo que se presenta en Estados Unidos y que cubre un hueco que va entre el viajero ultrarrico, que viaja en privado, y el de las aerolíneas comerciales, de masa.

Esencialmente, se trata de viajar como un VIP, pero con un precio asequible (no para todos, claro). Para operar el negocio, RoadRunAir obtuvo un Certificado de Transportista Aéreo y compró varios jets comerciales que operará y volará con su propia librea. Cada avión se ha convertido en 30 asientos de pasajeros VIP y se les ha dado interiores adaptados específicamente para permitir un asiento junto a la ventana para cada viajero.

Los clientes, según cuenta TravelDailyNews, viajarán en los jets de RoadRunAir desde terminales privadas (en los aeropuertos) en grupos de hasta 30 personas para experimentar un trato personalizado VIP exclusivo para actividades y visitas guiadas multidestino, mientras ahorran tiempo y molestias al evitar la seguridad y los registros de las terminales comerciales, según informaron a REPORTUR.us.

La compañía se lanza al mercado con tres itinerarios nacionales de Estados Unidos: los estados del sur (visitando Nashville, Memphis, Nueva Orleans, Chattanooga y Lynchburg), la costa oeste (San Francisco, Napa, Bryce, Zion, Antilope Canyon, Sedona y Vegas) y el noreste (Niágara, Hershey, Amish y DC).

Cada viaje dura de siete a nueve días, comenzando en Nueva York y Los Ángeles, según el recorrido, con planes para otras rutas que incluyen el Caribe, Europa, América Latina y más en una fecha posterior.

Las ventas y el marketing de los tours se centrarán en la distribución B2B a través de operadores turísticos y mayoristas, además de agentes de viajes minoristas y agentes de viajes en línea con comisiones muy competitivas.

Moti Engelman, director ejecutivo, comenta: “Hemos visto muchos intentos de organizar viajes con aviones privados, pero los aviones eran más pequeños y los precios mucho más altos. Sabíamos que esto se podía hacer a un precio asequible para cualquier viajero si operábamos y poseíamos los aviones y administrábamos los otros servicios nosotros mismos.” De eso se trata.