Las autoridades de aviación rusas han bloqueado a sus pilotos la salida al extranjero en la búsqueda de empleos, una vez que en el país las aerolíneas apenas están operando, según publicó el periódico Kommersant, habitualmente bien informado en estos asuntos. El país teme que sus pilotos pudieran terminar por paliar la falta de mano de obra en las aerolíneas occidentales (Despidos en la rusa Aeroflot por el veto de la UE).
Al mismo tiempo, el sector de la aviación ruso está despidiendo a sus pilotos porque ni hay trabajo ni hay horizontes a medio plazo. Desde marzo hay despidos que cada vez van a más, una vez se empieza vislumbrar que la operación en Ucrania no es cuestión de días ni de semanas.
El mecanismo para bloquear la salida de estos profesionales, según el periódico, es que la Agencia Federal de Transporte Aéreo (Rosaviatsia), equivalente a nuestra Aviación Civil, no certifica que los pilotos son tales, lo cual es el procedimiento normal cuando una autoridad de otro país pretende contratar a un piloto ruso. El periódico dice que Rosaviatsia ignora las solicitudes por completo o se escuda en la privacidad para no ofrecer la documentación solicitada (Las aerolíneas rusas, en la ruina financiera).
El presidente del sindicato de tripulaciones de vuelo ruso, Miroslav Boichuk, dijo que Rosaviatsia respondió a alrededor de 600 solicitudes de autoridades de aviación extranjeras entre fines de febrero y mediados de junio. Los destinos de los pilotos rusos estaban siendo principalmente Turquía, Tailandia, Malasia, Vietnam y Camboya. Cada mes hay unas 70 solicitudes de verificación de pilotos, procedentes del extranjero. «Esto apunta a un alto riesgo de escasez de tripulantes para respaldar el tráfico aéreo futuro», aducen las autoridades.
Aunque es ahora cuando hacer sentir su malestar, Rusia lleva al menos seis años sin certificar los pilotos que se quieren marchar. Ahora esta práctica parece relacionada con la idea del país de recuperar el tráfico aéreo, cosa que nadie consigue vislumbrar.
El sector de la aviación de Rusia se encuentra entre las industrias más afectadas por las sanciones occidentales sobre Ucrania debido a la interrupción de las entregas de nuevos aviones extranjeros y piezas de repuesto, así como a las prohibiciones de vuelos impuestas en represalia por la guerra. El gobierno anunció el lunes que planea invertir 770.000 millones de rublos (14.400 millones de dólares) para aumentar la participación de aviones de fabricación nacional al ochenta y uno por ciento para 2030, como ya publicó Preferente en su momento (China prohíbe los Boeing y Airbus rusos en el país)