La aviación comercial rusa está sufriendo con especial crudeza las sanciones impuestas por la comunidad internacional a raíz de la invasión de Ucrania. Justamente cuando empezaba a recuperarse el negocio tras la pandemia, las aerolíneas fueron duramente golpeadas por el bloqueo al que ha sido sometido el país, viéndose obligadas a cancelar la práctica total de las operaciones internacionales (La Unión Europea acuerda bloquear su espacio aéreo a los rusos).
El Gobierno de Vladimir Putin, consciente de la importancia de sostener a su hasta ahora potente industria de la aviación, ha trazado un plan de apoyo. Se trata de un programa integral para el desarrollo del transporte aéreo durante los próximos siete años.
Uno de los retos prioritarios establecidos en el mismo es rebajar la dependencia de forma drástica de los aviones de fabricación extranjera, tanto de la Unión Europea como de Estados Unidos. Su objetivo es que las aeronaves de fabricación rusa representen el 81% de las flotas de las aerolíneas del país en 2030 (Aeroflot destina un A350 nuevo para repuestos).
Yuri Borísov, designado recientemente director general de la agencia espacial rusa, Roscosmos, lamenta abiertamente que “los ciudadanos rusos todavía vuelen en aviones Boeing y Airbus de media y larga distancia”. “Nuestra tarea es eliminar gradualmente esta flota con aviones similares de fabricación rusa, como el MC-21 y el Tu-214”, remarca.
Según el programa del Gobierno ruso, las compañías aéreas recibirán 72 unidades de los MC-21 cada año a partir de 2029. Los primeros entrarán en servicio en 2024. Asimismo, planea fabricar 70 Tu-214 adicionales para 2030.
Por otro lado, Borísov incide en que “los aviones de pasajeros de corta distancia Superjet de fabricación rusa son el pilar de la flota aérea nacional”. “Ahora operamos alrededor de 150 y ampliaremos la flota desplegando Superjet New, un sustituto de importación cuya producción comenzará en 2023”, agrega.
“Estamos preparados para gastar más de 770 mil millones de rublos en la implementación del programa durante estos siete años. De esta cantidad, más de 150 mil millones de rublos financiarán proyectos de tráfico aéreo antes de que termine el año”, revela (Rusia admite la gravedad de su crisis de la aviación).